En el accidente murieron 71 de las 77 personas que iban a bordo del avión de Lamia.
La noche del lunes 28 de noviembre, el mundo del fútbol se iba a dormir consternado por una trágica noticia. El vuelo 2933 de la aerolínea boliviana LaMia, que llevaba al plantel del equipo brasileño Chapecoense hacia Medellín, se estrelló minutos antes de llegar a su destino.
En el accidente murieron 71 de las 77 personas que iban a bordo, entre ellas el piloto y jugadores y directivos del club Chapecoense de Brasil, así como periodistas. Solo los futbolistas Alan Ruschel, Jackson Follmann, Helio Zampier Neto, el periodista Rafael Henzel, el técnico de aviación Erwin Tumirik y la auxiliar de vuelo Ximena Suárez se salvaron.
El Chapecoense, es un club pequeño en Brasil con sede en la ciudad de Chapecó, estado de Santa Catarina. En siete años pasó de jugar en la cuarta a hacerlo en la división de honor del fútbol brasileño.
En el 2015 participó por primera vez en la Copa Sudamericana. Logró llegar a los cuartos de final, donde quedó eliminado por River Plate. En el 2016 dejó en el camino a equipos de la talla de Independiente de Avellaneda, Junior de Barranquilla y San Lorenzo de Almagro. Hasta llegar a la final del certamen continental.
Tras lo ocurrido, Atlético Nacional de Medellín, que debía ser rival de Chapecoense, elevó el pedido formal a la CONMEBOL para que les conceda el título de la Sudamericana a los brasileños. Y así fue. Un gesto noble en medio de la tragedia.
Comparte esta noticia