Solo en la última semana se registraron más de 22 mil nuevos casos de la COVID-19 en Rusia.
Rospotrebnadzor, la agencia estatal rusa de defensa del consumidor, aseguró que el incremento en los últimos días de los casos de la COVID-19 debido a las nuevas subvariantes del ómicron, las BA.4 y la BA.5, no requiere la imposición de medidas sanitarias restrictivas.
"La implantación de restricciones antiepidémicas por el aumento de los casos de la COVID-19 no es necesaria", señaló la agencia en un comunicado tras una reunión telemática de su directora, Anna Popova, con los responsables del organismo en las entidades de la Federación Rusa.
En la reunión, se destacó que es "poco probable" que se produzca un cambio significativo en el número de casos graves y de hospitalizaciones debido a la propagación de las nuevas subvariantes del ómicron.
"La enfermedad que provocan las subvariantes BA.4 y BA.5 tiene un curso más leve que la causada por las variantes alfa y delta", añade el comunicado.
Cifras de la pandemia
Según Rospotrebnadzor, la semana pasada en Rusia se registraron 22 683 pacientes con la COVID-19, lo que representa una tasa de 15,6 casos por 100 000 habitantes y un aumento del 8,2 % respecto de los siete días anteriores.
Las estadísticas oficiales referidas a los casos de la COVID-19 registrados en las dos últimas semanas señalan que la subvariante BA.2 del ómicron es la predominante en el país, detectada el 56,13 % secuenciaciones realizadas.
En segundo lugar, se sitúan la BA.4 y BA.5, con el 38,86 %, seguidas por la BA.1, con el 3,8 % y la variante delta, con el 1,2 %. (EFE)
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