En su famoso single "I'm gonna live till I die" de 1954, el cantante decía "voy a vivir hasta que muera". Han pasado 66 años desde la publicación de aquella canción, y 22 años desde su partida terrenal; sin embargo, Frank Sinatra aún no ha muerto.
"La voz", o quien es considerado uno de los mejores cantantes estadounidenses del Siglo XX, dejó de existir un 14 de mayo de 1998. Sobre sus hombros pesa una impecable carrera de grabaciones, películas, conciertos y curiosidades.
Hijo único de Natalina Garaventa y Antonino Sinatra, el pequeño Francis nació pesando 5.8 kilos por lo que su parto casi le cuesta la vida (y la de su madre). El uso de fórceps para sacarlo del útero materno le provocó lesiones en el rostro, la oreja y le destruyó el tímpano. Aún así, Sinatra creció como un apasionado de la música, llegando a cantar desde muy niño en la taberna de su padre.
La música, las películas, las mujeres e incluso una polémica relación con la Cosa Nostra italiana marcaron una álgida vida plagada de excesos. Frank Sinatra se casó cuatro veces, e intentó suicidarse en tres oportunidades. Murió el 14 de mayo de 1998 en West Hollywood (California) a los 82 años, a consecuencia de un ataque al corazón.