Asociaciones de pacientes que padecen esta enfermedad resaltaron las complicaciones que sufren padres y madres de familia; sobre todo en regiones, donde hay una grave carencia de especialistas para estos casos.
En el Perú se registran cada año 1 800 casos de cáncer infantil, según datos Organización Mundial de la Salud (OMS). Esta situación se torna aún más grave al conocerse el bajo número de oncólogos pediatras registrados en el Colegio Médico del Perú, pues solo existen 27 a nivel nacional. Veinticinco están en la capital, mientras que los otros dos se encuentran en La Libertad y Arequipa.
"Los oncólogos pediatras son escasos y están prácticamente todos en Lima. Entonces, no hay hospitales, no hay especialistas y no hay tratamiento especializado en todas las regiones del Perú", dijo Carla Ruiz de Castilla, directora de la asociación de pacientes Esperantra.
En diálogo con RPP, Ruiz comentó las dificultades que padecen los padres y madres de familia en provincias, quienes deben trasladarse a la capital para que sus hijos reciban la atención requerida, a falta de un tratamiento óptimo en sus ciudades de origen.
Según Ruiz, la ley de cáncer infantil establece la entrega de un subsidio económico a un trabajador por familia que tenga a un menor diagnosticado con la enfermedad durante el tiempo que dure el tratamiento. Pese a esta y otras ventajas de la norma, afirmó que aún se requieren mayores avances para optimizar la situación.
Entre estas medidas, consideró que se requiere mejorar los Institutos Regionales de Enfermedades Neoplásicas (IREN) en regiones, fomentar la formación y disponibilidad de profesionales especializados en oncología pediátrica en regiones, modernizar el equipamiento en los centros especializados y el acceso a nuevos tratamientos que ya se aplican en Europa y Estados Unidos.
Falta de diagnóstico temprano
RPP recogió testimonios de madres de familia que reflejaron la realidad de la situación del tratamiento de cáncer infantil en el Perú y las dificultades que padecen.
"Tengo mi niño de diez años, el cual tiene leucemia. Estoy 24/7 con mi niño, no puedo tener un trabajo estable porque nosotros dependemos del SIS y si nos ponemos a trabajar entonces nos quitan el SIS y no podemos trabajar", manifestó a RPP María Narro.
Por su parte, Reina Quispe, natural del Cusco, contó que su hijo falleció hace solo diez días, víctima de leucemia, tras haber recaído de la enfermedad este año. "Durante este tiempo, nosotros hemos tenido que viajar por los controles mes a mes. No podíamos trabajar tampoco porque debíamos cuidar a nuestros niños 24/7. Ni mi esposo pudo tener un trabajo formal porque corría riesgo de que le quitaran el SIS", dijo.
Tras estos testimonios, Ruiz de Castilla precisó que entre un 60 % y 80 % de muertes por cáncer infantil son prevenibles si se tuviera un diagnóstico oportuno.
"[Los niños] pasan por falta de diagnóstico oportuno, por un mal diagnóstico, por falta de tratamiento, falta de acceso a tratamiento innovador, por abandono del tratamiento; justamente porque los padres no pueden viajar mes a mes como ha manifestado una de las señoras y cubrir los pasajes, etc., y por recaídas, que es lo que manifestaba la señora de Cusco", indicó.
Ministro César Vásquez "no considera" a la sociedad civil
Por su parte, Karina Pujay, directora del colectivo Cáncer Infantil Perú, lamentó que todavía no se haya tenido reuniones con el ministro de Salud, César Vásquez, para dialogar sobre propuestas para revertir esta crítica situación.
"No nos considera a nosotros, a la sociedad civil, en estos momentos, prioridad para poder sentarnos a la mesa, poder conversar y poder articular. No solamente nosotros cumplimos un rol fiscalizador, sino también articulamos", refirió.
Enfatizó también en la importancia de optimizar el primer nivel de atención para contar con una evaluación adecuada a niños que presenten síntomas asociados con estas enfermedades.
"Si llegan tarde los niños es porque en el primer nivel de atención no hay esta sospecha. Los pediatras no sospechan de un cáncer porque siempre lo diagnostican o tienen sospecha de otros tipos de enfermedades, mas no lo asocian con el cáncer. Hoy en día, un niño que tiene algún tipo de síntoma, los llevan a los centros; pero, ¿qué hacen los pediatras? Tienen otro tipo de diagnóstico, mas no que sea un cáncer infantil", apuntó.
También resaltó las complicaciones ante la falta de oncólogos pediatras, obligando a los menores a ser atendidos por médicos de otras especialidades y corriendo el riesgo de recibir un tratamiento equivocado.
"Son médicos que no tienen la especialización en oncología pediátrica; sin embargo, les brindan tratamiento a los niños, les brindan tratamiento quimioterapéutico, radioterapéutico y esto no debe ser de esta manera, es imposible poder brindarle tratamiento a un niño con la sensibilidad que tienen estos niños oncológicos, un doctor que no ha sido especializado, no ha sido capacitado", mencionó.