"Les hemos medido la presión y se ha detectado cuadros de deshidratación", señaló una de las enfermeras de EsSalud que revisó a los trabajadores.
La salud de los técnicos electricistas despedidos hace 17 días de la empresa Electronorte de la ciudad de Chiclayo (Lambayeque) se deteriora luego que hace dos días iniciaran su huelga de hambre indefinida para exigir ser repuestos e incorporados a planilla.
Personal de EsSalud revisó a los cinco trabajadores que solo consumen liquido para mantenerse al interior de las carpas, donde además pernoctan en los exteriores de la empresa eléctrica.
“Hemos revisado a cada uno de ellos desde muy temprano, les hemos medido la presión y se ha detectado cuadros de deshidratación. No están ingiriendo alimento por esta huelga de hambre, pero están poniendo en riesgo su salud”, expresó la enfermera de EsSalud, Caterine Salazar Arevalo.
La especialista pidió a los manifestantes levantar su medida de lucha ya que de acuerdo a lo deteriorado de su organismo, no podrían resistir un día más, poniendo en riesgo su vida.
“Ahora los podemos atender con líquidos de manera ambulatoria, pero pasarán las horas y esto será más complicado. Es cierto que depende de su organismo, pero no aguantarán más horas”, agregó.
El dirigente Luis García Sancarranco sostuvo que esta lucha continuará hasta que los funcionarios de la empresa Electronorte cumplan con el acta de requerimiento de la Gerencia Regional de Trabajo que dispone su reincorporación laboral.
Los manifestantes llevan ya 17 días de lucha, pero hasta el momento las autoridades de la empresa eléctrica no atienden sus pedidos.
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