Carlitos fue rescatado por Fuerzas Armadas en enero de 2010, pero tiempo que vivió secuestrado con otros niños fue torturado por camarada ´Sergio´ quien le quemó manos y pies.
Un niño que fue secuestrado por Sendero Luminoso y pudo ser rescatado por las Fuerzas Armadas a inicios del 2010, había sido sometido a una cruel tortura durante el tiempo que le tocó vivir en cautiverio en manos del grupo subversivo.
El trauma ocasionado al pequeño ‘Carlitos’, de aproximadamente nueve años, por el camarada ‘Sergio’ se evidencia en las evaluaciones que le realizaron los especialistas del Inabif, institución en la que viene creciendo y tratando de olvidar los terribles momentos que le tocó vivir en los tres años que estuvo secuestrado.
Un reportaje realizado por el programa Punto final informa que cuando las Fuerzas Armadas ingresaron al campamento terrorista cerca de la comunidad de Canaire en el VRAE, capturaron a ‘Sergio’ quien había golpeado brutalmente al menor.
“El niño por jugar soltó a una niña que escapó. Cuando el individuo regresa acciona de una manera extrema contra el niño y lo golpea y le provoca heridas en la cabeza", dice Lady Chávez psicóloga del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas.
Pero luego evidenciaron que también le había quemado las manos y los pies con un tronco ardiente como castigo por haber cometido una falta.
Como no quería hablar ni se dejaba tocar, mostrando en todo momento desconfianza, los psicólogos del Inabif lo hicieron dibujar todo lo que habñia visto y pudieron darse cuenta en ese momento del terrible tormento que pasan los niños que se mantienen secuestrados por el grupo terrorista.
La crueldad con la que son tratados los menores y las cosas que tienen que ver sobrepasa los límites de la realidad.
“Él habla (en los dibujos) que esta persona ‘Sergio’ era muy mala, los trataba muy mal que les pegaba, torturaba y los amenazaba de muerte. En sus primeros dibujos había machetes y niños descuartizados, también helicópteros y soldados”, dice el psicólogo Gianfranco Vacchelli quien señala que necesariamente Carlitos tuvo que haber visto con sus propios ojos como mataban a otros niños.
Indica que el hecho de dibujar helicópteros evidencia que fue enviado a zonas de combate contra las Fuerzas Armadas.
Afortunadamente, Carlitos está creciendo y desarrollándose junto a otros niños de su edad, pero mantiene cierta reserva e inseguridad al hablar con desconocidos.
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