Áncash, Cajamarca, Loreto, Huánuco, Pasco y Arequipa son las zonas donde más se ha realizado decomiso de máquinas tragamonedas.
"Después de un período administrativo, estas máquinas pasan a destrucción. Estas 557 máquinas representan alrededor de un millón de dólares"
Yuri Guerra Padilla, director general de Dirección General de Juegos de casinos y máquinas tragamonedas del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo.
Más de 500 máquinas tragamonedas fueron decomisadas en diferentes ciudades del país porque eran usadas en locales ilegales, no pagaban impuestos y por no tener controles para evitar problemas como ludopatía en grupos vulnerables, como menores de edad, informó el director general de Dirección General de Juegos de casinos y máquinas tragamonedas del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo, Yuri Guerra Padilla.
En diálogo con el programa Ampliación de Noticias Regional (ADNr), detalló que estas máquinas de juegos estarían valorizadas en más de un millón de dólares.
“En total son 557 máquinas que han sido decomisadas, producto de su explotación en locales ilegales, además no venían pagando impuestos y no tienen controles adecuados para los grupos vulnerables de la población, como son menores de edad. Esto genera problemas de ludopatía. Hemos clausurado además estos locales informales. Y después de un período administrativo, estas máquinas pasan a destrucción. Estas 557 máquinas representan alrededor de un millón de dólares que ha sido objeto de destrucción”, precisó.
Detalló que el decomiso de estas máquinas tragamonedas se concentró en ciudades donde es difícil el acceso por la lejanía de las zonas y donde se concentran altos niveles de contrabando.
“Hemos hecho estos decomisos en distintas regiones como Áncash, Cajamarca, Loreto, Huánuco, Pasco. Por ejemplo, en el caso de Arequipa hemos intervenido en Secocha, que es una zona difícil, muy lejos de la ciudad, muy complicada. Hemos decomisado máquinas en Caballococha, donde no se llega fácilmente”, agregó.
Guerra Padilla explicó que, de acuerdo al artículo 243 C del Código Penal, los dueños de estas máquinas enfrentan un proceso penal por explotación ilegal de los tragamonedas y en la mayoría de operativos abandonan sus equipos y estos pasan a destrucción.
“Es que muchas de estas máquinas las colocan en locales muy lejanos a las capitales de provincia y les sacan las placas de identificación para que no se les reconozca, para que no se pueda identificar al propietario de las máquinas. Inclusive los dueños del local una vez que intervenimos se retiran, abandonan las máquinas y no las solicitan. Entonces esto pasa a un proceso administrativo y después este proceso pasa a la destrucción”, explicó.
¿Por qué ingresan tantas máquinas tragamonedas?
El funcionario también explicó que muchas de estas máquinas ingresan por las fronteras, por el débil control de la Policía Nacional y Aduanas.
“Algunas entran de manera irregular por el tema de la frontera. Antes teníamos el control total de los ingresos de Aduanas, pero por un cambio normativo todo el control lo tienen ellos. Entonces, por ahí podría filtrarse un poco las máquinas. Hasta hace un par de años atrás no entraba ninguna máquina al país sin autorización del MINCETUR. Ahora vamos por el tema de riesgo cada vez que la SUNAT lo requiere”, precisó.
Yuri Guerra indicó que a nivel de todo el país hay un total de 150 mil máquinas tragamonedas registradas, que cumplen con toda la formalidad y las cuales tienen una placa de identificación, que es un holograma especial.
Cuando los dueños deciden darles de baja a las máquinas comunican al Mincetur, aunque las autoridades de esta última entidad no están presentes en la destrucción y esto podría generar aprovechamientos de algunos dueños para un uso posterior de los tragamonedas y casinos.
Finalmente precisó que tienen a nivel nacional 73 mil máquinas interconectadas, y de presentarse alguna irregularidad en alguna sala de juegos, es reportada en línea al instante para los operativos en coordinación con la Policía y Aduanas.