“Aquí hay 23,000 nacimientos al año. La norma dice que por 1000 nacimientos debe haber una cama de UCI con todos los equipamientos y solo tenemos doce”, dijo el médico del área de Neonatología, Wilfredo Gamonal.
El índice de muertes infantiles ha incrementado en los últimos meses en el Hospital Regional de Lambayeque debido a la falta de máquinas incubadoras, ventiladores artificiales y mala alimentación parenteral en el área de neonatología.
El especialista de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de Neonatología, Wilfredo Gamonal, dijo a RPP que un promedio de cinco bebés fallecen al mes por falta de estos equipos especializados, cifra que podría evitarse si las autoridades regionales se preocuparan por el equipamiento ideal, sobre todo de este espacio donde se atienden a bebés prematuros y con diversas complicaciones posnatales.
El médico explicó que en Lambayeque nacen 23,000 niños al año, y la norma técnica precisa que por cada mil nacimientos debería existir un cama de UCI con todos los equipamientos; sin embargo, en el hospital regional, a donde llegan pacientes no solo de la región, sino de otras regiones vecinas (Jaén, Piura, Amazonas, Cajamarca), apenas existen 12 máquinas que no permiten dar la atención oportuna a los pequeños.
“Esos niños se podrían haber salvado si tuviéramos las condiciones de equipamiento adecuado. La mortalidad ha aumentado por estas deficiencias. Usted vaya a emergencia de neonatología y va a ver que los neonatos están en incubadoras de transporte, esperando cupo par- a pasar a UCI, están en riesgo” indicó.
La autoridad precisó que ya se ha hecho este pedido a las autoridades del sector, debido a que uno de estos equipos estaría valorizado en 150 mil soles; no obstante, hasta el momento no hay respuesta del sector para solucionar esta problemática.
Estas deficiencias también fueron constatadas por el congresista Héctor Becerril, quien prometió gestionar ante la Comisión de Salud del Congreso de la República y el Ministerio de Salud, el presupuesto necesario para la resolución de estos inconvenientes.
Además, se verificó que algunos pacientes se encuentran en el piso y hacinados en camillas en los pasadizos por falta de espacio en el hospital lambayecano.
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