En un nuevo enfrentamiento entre las gigantes, es ahora Microsoft quien reclama el contrato que ganó Amazon para ofrecer servicios en la nube al gobierno.
Amazon ha ganado un contrato de 10 mil millones de dólares con la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) de EE. UU. para desplegar una infraestructura con un proveedor de servicios en la nube. Microsoft, otra de las empresas buscando la licitación, ahora reclama por el resutlado.
Tal como pasó con el suculento contrato JEDI, ambas gigantes tecnológicas están intentando retrasar la firma del contrato poniendo reclamos para que se transparente el por qué se eligió un nombre sobre el otro. En medio hay miles de millones de dólares.
El contrato de la NSA para la nube
Microsoft ha presentado una queja ante la Oficina de Responsabilidad del Gobierno (GAO), alegando, según los informes, que el producto de Amazon no se evaluó correctamente.
El gigante de Windows siente que en una comparación lado a lado de su tecnología con la de Amazon, ganaría y siente que el proceso aquí no fue muy justo.
La GAO tiene hasta el 29 de octubre para responder a la queja de Microsoft, y es probable que este no sea el final de la guerra de desgaste digital de la pareja.
Caso similar, pero con los nombres al revés, sucedió hace poco con el proyecto JEDI. El Pentágono quiere crear un gran sistema operativo basado en la nube para las Fuerzas Armadas de EE.UU., aprovechando las capacidades tecnológicas de proveedores privados para crear nuevas aplicaciones en el campo de batalla y escogió a Microsoft para realizarlo, con una licitación de 10 mil millones de dólares.
Sin embargo, Amazon reclamó argumentando que el gobierno de Donald Trump tomó una decisión política debido a sus discrepancias. Ante ello, y tras meses de polémica, el Pentágono canceló el contrato con Microsoft y ordenó un reinicio del proceso.
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