La cancelación de deportación es un recurso legal en Estados Unidos que permite a ciertos inmigrantes evitar la expulsión del país. ¿Quiénes califican a esto?
Enfrentar un proceso de deportación en Estados Unidos es una situación difícil, pero en ciertos casos, la ley permite a algunos inmigrantes solicitar la cancelación de su expulsión y obtener un estatus legal en el país.
Este beneficio no está disponible para todos y requiere cumplir con requisitos específicos, como tiempo de residencia, buen carácter moral, entre otros criterios. Por ello, aquí te explicamos quiénes pueden calificar.
Te recomendamos
¿Quiénes califican a la cancelación de deportación en EE.UU.?
Los criterios de elegibilidad para la cancelación de deportación varían según el estatus migratorio de cada inmigrante. A continuación, te mencionamos los requisitos para residentes permanentes legales y para inmigrantes no permanentes o indocumentados:
Residentes permanentes legales (LPR)
- Tiempo como residente permanente: Debes haber tenido la residencia permanente legal por un mínimo de cinco años. Esto significa que tu tarjeta de residencia (Green Card) debe haber estado vigente durante ese período antes de que se inicie el proceso de deportación.
- Residencia continua en Estados Unidos: Es necesario que hayas vivido de manera ininterrumpida en el país durante al menos 7 años después de haber sido admitido legalmente. Salidas prolongadas o ciertos problemas legales podrían afectar este requisito.
- Historial legal limpio: No debes haber sido condenado por un delito grave, conocido legalmente como “delito agravado” (aggravated felony). Estos incluyen delitos como fraude de gran escala, tráfico de drogas, violencia grave, entre otros.
Inmigrantes no permanentes o indocumentados
- Residencia continua en Estados Unidos: Debes haber vivido en el país de forma ininterrumpida durante al menos 10 años antes de que comience tu proceso de deportación. Si has salido del país por períodos prolongados, esto podría afectar tu elegibilidad.
- Buen carácter moral: Durante todo el tiempo que hayas residido en Estados Unidos, debes demostrar una conducta intachable. Esto implica no haber cometido delitos graves ni haber participado en actividades que puedan afectar negativamente tu historial.
- Ausencia de condenas por delitos específicos: No debes haber sido condenado por ciertos delitos que, según la Ley de Inmigración y Nacionalidad (INA), te harían inadmisible o deportable. Esto incluye delitos graves como fraude, violencia o tráfico de drogas.
- Dificultades extremas para un familiar cercano: Debes demostrar que tu deportación causaría un perjuicio excepcional y extremadamente inusual a un cónyuge, padre o hijo que sea ciudadano estadounidense o residente permanente legal. No basta con demostrar dificultades económicas o emocionales comunes; la situación debe ser verdaderamente extraordinaria.
Es importante destacar que la cancelación de deportación es una medida discrecional y su aprobación depende de la evaluación de un juez de inmigración. Además, existen límites anuales en el número de estas cancelaciones que pueden ser otorgadas.
Video: YouTube | El Heraldo de México
Comparte esta noticia