Aisikaier Wubulikasimu caminaba de espaldas durante un acto de malabarismo y con los ojos vendados.
Un acróbata llamado, Aisikaier Wubulikasimu, sobrevivió una estrepitosa caída mientras intentaba romper un record mundial al caminar sobre una cuerda floja de 700 metros de longitud, de espaldas, con los ojos vendados y sin arnés de seguridad.
El escalofriante hecho se registró en un valle, ubicado en la provincia Hunan, en China.
Al momento de caerse, el sujeto se encontraba a solo unos metros de su meta, en un trayecto que le había demorado cerca de cincuenta minutos.
Afortunadamente, unos arbustos detuvieron la caída del acróbata, quien salió de esta aventura solo con heridas leves.
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