Lo que debía ser una celebración, terminó en enfrentamientos y violencia en la Plaza de Armas de Sicuani.
Los pobladores de Sicuani, en el Cusco, se alistaban para un corso organizado por la Municipalidad en la Plaza de Armas, pero una protesta terminó con la fiesta y convirtió el lugar en una especie de cuadrilátero de lucha libre.
El corso alegórico conmemoraba el aniversario 123 de la ciudad, pero cientos de manifestantes aparecieron en la periferia de la Plaza de Armas provistos de cartelones y pidiendo a gritos la salida del actual alcalde Mario Velásquez Roque y de sus funcionarios.
Medios locales cuentan que los trabajadores ediles inicialmente hicieron caso omiso a la protesta e intentaron proseguir con el corso. Sin embargo, las fricciones no se hicieron esperar y poco tiempo después ediles y manifestantes se agarraron a maderazos.
Finalmente, la protesta pudo más y parte del corso no pudo realizarse porque algunos trayectos lucieron vacíos tras la partida de atemorizados asistentes que optaron por abandonar el lugar ante los hechos de violencia.
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