El hecho ha causado indignación entre los fieles de la catedral de Florida, donde ocurrió este robo. Fuentes eclesiásticas aseguran que las piezas robadas no tienen un valor significativo.
El niño Jesús del pesebre instalado en la catedral de la ciudad uruguaya de Florida se ha quedado huérfano y sin cuna debido a los ladrones, lo que ha causado indignación entre los fieles, según dijeron hoy a Efe fuentes eclesiásticas.
El obispo de Florida, Martín Pérez Scremini, descubrió este sábado la falta de las figuras de la Virgen María y San José, así como de la cuna donde iba a colocarse la figura del niño.
El niño se salvó porque "no estaba puesto todavía", declaró hoy a Efe el vicario parroquial, Giovanni Chinchilla, quien explicó que desde el 10 de diciembre el nacimiento se iba colocando por partes, con la idea de que el día de Navidad resplandeciese "con todo su brillo".
Los responsables del templo, que fue visitado por el papa Juan Pablo II en 1988, no se explican las razones por las que alguien quiso llevarse las piezas del portal de Belén.
Las piezas desaparecidas son antiguas, de tamaño mediano y hechas de yeso, y no tienen demasiado valor económico.
Chinchilla hizo un llamamiento a la buena voluntad de las personas para que devuelvan lo robado y precisó que no se ha presentado denuncia a la policía.
El vicario anunció que los feligreses no se quedarán sin nacimiento durante la celebración de la Navidad, ya que las figuras perdidas serán reemplazadas por otras.
La Basílica Catedral de Florida, de estilo neorrenacentista e inaugurada en 1908, fue declarada en 1993 Santuario Nacional de la "Virgen de los Treinta y Tres", la patrona de Uruguay.
Es precisamente esta virgen la única pieza que cuenta en la iglesia con dispositivo de seguridad para evitar daños y robos.
EFE
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