Obesidad, envejecimiento prematuro, diabetes, hipertensión e incluso cáncer, son algunas de las enfermedades que puede causar el consumo de aceite reutilizado.
En los hogares o negocios de comida, por abaratar costos, reutilizan el aceite para las preparaciones de sus productos; una práctica que resulta dañina para la salud de los consumidores.
Obesidad, envejecimiento prematuro, diabetes, hipertensión e incluso cáncer, son algunas de las enfermedades que puede causar el consumo de aceite reutilizado.
“Este aceite ya ha pasado por una serie de cambios y procesos derivados del calor y por residuos de los alimento, hacen que este aceite deje de ser saludable”, dijo a RPP Noticias la nutricionista Sara Abu-Sabbah.
Al ser recalentado, el aceite produce radicales libres, sustancias que dañan nuestras células, como es el caso de la acrilamida, agente tóxico para el cerebro y además uno de los principales agentes cancerígenos.
“Nunca se debe dejar que el aceite llegue al punto de humo porque al quemarse deja de ser saludable”, explicó la especialista.
De igual forma, el aceite recalentado produce ácidos grasos trans, que aceleran el proceso de coagulación de la sangre y por tanto el riesgo de infartos.
En ese sentido la nutricionista recomendó no intentar freír en sartenes quemadas, lo mejor es hacerlo en sartenes con revestimiento de teflón. “Si le sobró aceite en una fritura, tírelo, no lo reutilice”, finalizó.
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