De acuerdo con la Asociación del Cáncer ésta es la principal causa de muerte entre las mujeres hispanas.
El cáncer de seno cuesta la vida a unas 45.000 mujeres cada año en Estados Unidos, cifra que puede reducirse significativamente con sólo realizarse una mamografía a partir de los 40 años, advirtió la radióloga argentina Marcela Böhm-Vélez.
"Detectar un cáncer temprano puede curarlo y la mamografía es la mejor herramienta para salvar la vida a una mujer", afirmó Böhm-Vélez, portavoz de la campaña Rostros de la Salud, dirigida a la comunidad hispana.
Destacó que menos del 40 por ciento de las latinas en EE.UU. acuden por una mamografía cada año, como debe de ocurrir a partir de los 40 años.
De acuerdo con la Asociación del Cáncer ésta es la principal causa de muerte entre las mujeres hispanas, quienes también tienen mayores probabilidades de recibir un diagnóstico cuando la enfermedad está en estado avanzado, lo cual lo hace más difícil de tratar.
El cáncer de seno es un tumor maligno (canceroso) que se origina de las células del seno y ocurre principalmente en las mujeres, pero los hombres también pueden desarrollar la enfermedad.
No obstante, resulta cien veces más común entre las mujeres y la incidencia aumenta con la edad.
En Estados Unidos los cálculos más recientes de la Sociedad Americana del Cáncer en cuanto al cáncer de seno para 2010 indican que hay alrededor de 207.090 casos nuevos de cáncer invasivo de seno y que dos de cada tres mujeres tenía 55 años o más cuando se les diagnosticó la enfermedad.
Los datos también revelan que hay alrededor de 54.010 nuevos casos no invasivos, que es la forma más temprana de cáncer de seno.
La probabilidad de que una mujer desarrolle cáncer invasivo de seno durante su vida es un poco menos de uno de cada ocho y la probabilidad de morir es de aproximadamente uno en cada 35 mujeres.
Böhm-Vélez, profesora de radiología en la Universidad de Pittsburg, recordó que cuando se descubre tardíamente lleva a que la cirugía "sea más invasiva, más traumática, podría necesitar quimioterapia y muchas mujeres no van a sobrevivir".
"En los últimos 20 años en este país hemos podido reducir la mortalidad por cáncer del seno en un 40 por ciento", dijo la también conferenciante, quien lamentó que las latinas no acudan periódicamente a la mamografía, lo que atribuyen a problemas con el idioma, desconocimiento de los riesgos y la falta de información en español.
En la actualidad hay más de dos millones y medio de sobrevivientes de cáncer de seno en Estados Unidos.
Destacó que para ayudar a las mujeres latinas se ha lanzado la campaña en la web en español www.retratosdesalud.com, donde hay información sobre las mamografías y centros de salud que atienden en español.
También encontrarán las historias inspiradoras de mujeres que han querido compartir su experiencia.
"La mayoría de las mujeres que tiene cáncer de mama es porque no se ha realizado el estudio. El cáncer entre los 40 a 50 años es a veces más agresivo, por lo que no hay que esperar a encontrarse una masa para acudir al médico", reiteró la radióloga, que también educa a médicos y pacientes de toda América Latina por medio de seminarios y lecturas.
Böhm-Vélez viaja a países donde la detección del cáncer y las tasas de supervivencia son bajas para concienciar sobre esta enfermedad.
La radióloga señaló además que se está detectando cáncer de seno a mujeres menores de 40 años, por lo que exhortó a las que tienen historia familiar de la enfermedad a acudir a su médico porque probablemente tienen que comenzar con las mamografías mucho antes.
EFE
"Detectar un cáncer temprano puede curarlo y la mamografía es la mejor herramienta para salvar la vida a una mujer", afirmó Böhm-Vélez, portavoz de la campaña Rostros de la Salud, dirigida a la comunidad hispana.
Destacó que menos del 40 por ciento de las latinas en EE.UU. acuden por una mamografía cada año, como debe de ocurrir a partir de los 40 años.
De acuerdo con la Asociación del Cáncer ésta es la principal causa de muerte entre las mujeres hispanas, quienes también tienen mayores probabilidades de recibir un diagnóstico cuando la enfermedad está en estado avanzado, lo cual lo hace más difícil de tratar.
El cáncer de seno es un tumor maligno (canceroso) que se origina de las células del seno y ocurre principalmente en las mujeres, pero los hombres también pueden desarrollar la enfermedad.
No obstante, resulta cien veces más común entre las mujeres y la incidencia aumenta con la edad.
En Estados Unidos los cálculos más recientes de la Sociedad Americana del Cáncer en cuanto al cáncer de seno para 2010 indican que hay alrededor de 207.090 casos nuevos de cáncer invasivo de seno y que dos de cada tres mujeres tenía 55 años o más cuando se les diagnosticó la enfermedad.
Los datos también revelan que hay alrededor de 54.010 nuevos casos no invasivos, que es la forma más temprana de cáncer de seno.
La probabilidad de que una mujer desarrolle cáncer invasivo de seno durante su vida es un poco menos de uno de cada ocho y la probabilidad de morir es de aproximadamente uno en cada 35 mujeres.
Böhm-Vélez, profesora de radiología en la Universidad de Pittsburg, recordó que cuando se descubre tardíamente lleva a que la cirugía "sea más invasiva, más traumática, podría necesitar quimioterapia y muchas mujeres no van a sobrevivir".
"En los últimos 20 años en este país hemos podido reducir la mortalidad por cáncer del seno en un 40 por ciento", dijo la también conferenciante, quien lamentó que las latinas no acudan periódicamente a la mamografía, lo que atribuyen a problemas con el idioma, desconocimiento de los riesgos y la falta de información en español.
En la actualidad hay más de dos millones y medio de sobrevivientes de cáncer de seno en Estados Unidos.
Destacó que para ayudar a las mujeres latinas se ha lanzado la campaña en la web en español www.retratosdesalud.com, donde hay información sobre las mamografías y centros de salud que atienden en español.
También encontrarán las historias inspiradoras de mujeres que han querido compartir su experiencia.
"La mayoría de las mujeres que tiene cáncer de mama es porque no se ha realizado el estudio. El cáncer entre los 40 a 50 años es a veces más agresivo, por lo que no hay que esperar a encontrarse una masa para acudir al médico", reiteró la radióloga, que también educa a médicos y pacientes de toda América Latina por medio de seminarios y lecturas.
Böhm-Vélez viaja a países donde la detección del cáncer y las tasas de supervivencia son bajas para concienciar sobre esta enfermedad.
La radióloga señaló además que se está detectando cáncer de seno a mujeres menores de 40 años, por lo que exhortó a las que tienen historia familiar de la enfermedad a acudir a su médico porque probablemente tienen que comenzar con las mamografías mucho antes.
EFE
Comparte esta noticia