Las mujeres que padecen de incontinencia urinaria pueden ser víctimas de una pérdida progresiva de la autoestima, ansiedad y vergüenza, que podrían llevarlas a un estado de depresión.
La incontinencia urinaria en la mujer puede afectar negativamente a su aspecto físico, psicológico y social. El escape de orina al toser o reír, tener urgencia al acudir al baño y miccionar involuntariamente al hacer alguna actividad física, son algunas de las características que muchas veces no cobran importancia pero podrían causar una pérdida progresiva del autoestima.
Las mujeres que padecen de incontinencia urinaria pueden ser víctimas de una pérdida progresiva de la autoestima, ansiedad y vergüenza, que podrían llevarlas a un estado de depresión. Además es importante reafirmar que la incontinencia urinaria no se relaciona necesariamente con la vejez.
El suelo pélvico es la estructura muscular y ligamentaria que sirve de apoyo y sostén a los órganos que están contenidos en la pelvis, como la vejiga, útero y recto. Ante problemas del suelo pélvico, es importante acudir con un profesional de la salud para recibir un diagnóstico adecuado. De lo contrario, puede incrementar las probabilidades de contraer infecciones urinarias y alteraciones a nivel de la piel.
¿Qué condiciones pueden agravar mi incontinencia urinaria?
• El sobrepeso
• Presión producida por faja o pantalones ceñidos
• Carga de peso indiscriminadamente
• El parto (sobre todo si son varios) y embarazo provocan distenciones de los músculos del suelo pélvico.
• El inicio rápido de ejercicios abdominales post parto sin haber trabajado el suelo pélvico.
• Cirugías abdominales
• Hernias abdominales e inguinales
¿Cómo puedo mejorar mi condición?
1. Elabora un “Diario Miccional”
Registrando las veces que acudes al baño, la cantidad de líquido ingerido, el número de escapes de orina y tipos de actividades realizadas a diario, podrás tener una herramienta que permite conocer mejor la actividad urinaria diaria. El “Diario Miccional” se debe llenar durante las 24 horas por 3 días y servirá de ayuda al profesional de la salud que decidas acudir.
2. Acude a tu ginecólogo
Es el especialista en enfermedades del sistema reproductor femenino (útero, vagina y ovarios), dentro de las cuales se encuentra la incontinencia urinaria.
3. Acude a tu fisioterapeuta
Tras una evaluación, el especialista se encargará de reforzar la musculatura del suelo pélvico mediante ejercicios para esa zona. Además, el uso de electroestimulación y una mejor postura, te ayudará a recuperar tu suelo pélvico para mejorar tu calidad de vida.
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