Organización Mundial de la Salud informó que el desequilibrio entre ingesta calórica y gasto calórico es la principal causa de la obesidad infantil.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) sostuvo que el desequilibrio entre la ingesta calórica y el gasto calórico es la principal causa de la obesidad en niños y adolescentes. A la vez, advirtió que el sobrepeso es un problema social que requiere un enfoque poblacional.
En su portal institucional, señaló que es una tendencia mundial el aumento del consumo de alimentos hipercalóricos con abundantes grasas y azúcares, pero con escasas vitaminas, minerales y otros micronutrientes saludables.
En el mismo sentido, indicó que la práctica de actividades físicas ha caído por el aumento de actividades recreativas sedentarias, los nuevos modos de transportes y la creciente urbanización.
La OMS anotó que la obesidad infantil se asocia no solo con una dieta malsana y con la escasa actividad física, sino también con el desarrollo social y económico “y las políticas en materia de agricultura, transportes, planificación urbana, medio ambiente, educación y procesamiento, distribución y comercialización de los alimentos”.
“El problema es social y por consiguiente requiere un enfoque poblacional, multisectorial, multidisciplinario y adaptado a las circunstancias culturales”, puntualizó.
Finalmente, acotó que los niños y adolescentes no eligen los alimentos que consumen ni tienen la capacidad para comprender las consecuencias a largo plazo de su comportamiento. Por tanto, urge una atención especial en la lucha contra la “epidemia de la obesidad”.
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