Los cohetes Super Heavy llevarán pasajeros y carga a la órbita terrestre, la Luna y a Marte.
Elon Musk ha expresado sus deseos de que su compañía espacial SpaceX puede atrapar a los próximos cohetes Super Heavy en sus respectivas torres de lanzamiento antes que aterricen en el suelo.
Este tipo de cohetes, los cuales están destinados a enviar carga y pasajeros a la Luna y Marte en los próximos años, son mucho más grandes que los Falcon Heavy y sirven de propulsores de los Starship rumbo a las afueras de la Tierra.
Es una idea extremadamente audaz, y una que pondría tanto al propulsor Super Heavy como a la propia torre de lanzamiento en riesgo de una falla catastrófica, según Ars Technica. Pero si funciona, el logro sería un gran paso adelante en los planes de SpaceX para reutilizar más y más cohetes. El propio Musk asegura que, de lograrlo, en una hora después de que sea atrapado, el cohete puede volver a dispararse.
"Vamos a tratar de atrapar al Super Heavy Booster con el brazo de la torre de lanzamiento, usando las aletas de la rejilla para tomar la carga", tuiteó Musk.
Aparte de un tiempo de respuesta más rápido, el uso de la torre de lanzamiento para atrapar un propulsor súper pesado permitiría a SpaceX construir el cohete para que sea más liviano y, por lo tanto, más eficiente como vehículo. Sin usar la torre, el propulsor tendría que aterrizar sobre sus propias patas, lo que agregaría entre cinco y diez toneladas métricas de peso.
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