Delfina Paredes en mesa redonda sobre Micaela Bastidas

Laureada por su talento actoral y autoral,  Delfina Paredes además de sus prolíficos méritos en los escenarios del Perú y otros lugares del mundo desarrolló una silenciosa tarea de difusión teatral y de docencia literaria entre niños de comunidades altoandinas en el Cusco como en su propia casa cuando se encuentra en Lima.

Nuestra primera actriz y dramaturga participará en la jornada cultural "Kallpay Warmi", que se realizará los días martes 20 y miércoles 21 de abril, a horas 7:15 p.m., en la Derrama Magisterial, Av. Gregorio Escobedo 598, Jesús María. Ingreso libre.  

El  martes 20,  en la mesa redonda "Mujer y poder en nuestra historia", Delfina Paredes expondrá el tema "Micaela Bastidas y las curacas insurgentes". Antes la arqueóloga Verónica Chirinos Cubillas  ilustrará sobre "La señora de Cao y las Capullanas: El matriarcado andino". Por su parte la socióloga Catherine Meza abordará "Conquistamos nuestra ciudadanía: Doña Angélica Mendoza".  

Sobre la exposición que realizará doña Delfina se informa que  Micaela Bastidas y mujeres como Tomasa Tito Condemayta, Marcela Castro, Manuela Tito Condori, Bentura Monjarraz, Lorenza Mendigure, Bartolina Sisa y Gregoria Apaza son algunas que intervinieron en la gran gesta revolucionaria de 1780.

Fueron estrategas, consejeras, políticas y socias financistas. Sumaron sus capacidades a la revolución de Túpac Amaru y su participación fue decisiva para esta gesta.   Delfina Paredes estudió en la ENAE (Escuela Nacional de Arte Escénico) entre 1956 y 1957. Su primera pieza "Micaela Bastidas", fue premiada en 1967 en el Concurso Nacional de Teatro Escolar del TUSM. En 1975 escribió "Evangelina" creando así uno de los personajes más populares del teatro y la televisión. En 1994 escribió el monólogo "Evangelina retorna de La Breña".  

La destacada actriz también ha realizado trabajos para la televisión y el cine. Recibió un homenaje de sus colegas por el Día Mundial del Teatro y el Ministerio de la Mujer reconoció públicamente su destacada trayectoria en el mundo de la actuación.  

Continúa Kallpay Warmi  

El miércoles 21 de abril en la mesa de testimonios titulada "Emergentes andinas y amazónicas" intervendrán la empresaria wanka Irene Guerra de San Román; Marina Díaz Guzmán, actriz de teatro que viaja a Lima especialmente desde Iquitos; Felicita Loayza Cárdenas, arpillera ayacuchana y presidente de la Asociación Mama Killa; y la  educadora Esther Taco Bellido. Finalmente la exposición plástica "Doña Angñelica Mendoza" estará a cargo de los artistas  Jorge Miyagui, Mauricio Delgado, Lola Apolinario y Max Atoche.

Se entregará a los profesores asistentes un cuadernillo de la conferencia y un CD con las interpretaciones de los ganadores y finalistas del Takiykusun Amauta años 2008 y 2009.   La gobernante más importante en toda nuestra América perteneció a la élite Mochica, tenía entre 20 y 25 años; era mujer.

Hace 1700 años "La señora de Cao" condujo el poder político, administrativo y religioso del Valle de Chicama. Fue enterrada en un mausoleo profusamente decorado y un rico ajuar compuesto por 18 collares de oro, lapislázuli, cuarzo y turquesa, tenía treinta adornos de nariz de oro y plata, diademas y coronas de cobre dorado. Su cuerpo presentaba tatuajes de serpientes y arañas, aún visibles, que representan la fertilidad de la tierra.  

Mujeres tallanas en 1528, según narran las crónicas, gobernaban pueblos de Piura. Eran las Capullanas. Se destacaron por su capacidad administrativa. En el valle del Chira algunas fueron guerreras. Estas señoras principales fueron la versión femenina del Curaca y tuvieron sus mismos privilegios. Vivir de las redistribuciones, ser trasladadas en literas y escoger a varios esposos del pueblo o de la gente noble.   

La señora Angélica Mendoza de Ascarza, ayacuchana que vivió el secuestro y desaparición de su hijo Arquímedes por el Estado en 1983. Su búsqueda fue incansable. El dolor, injusticia y discriminación por ser mujer quechua hablante las convirtió en fortaleza. La desesperación ante la iniquidad se transformó en capacidad de organización.

Ella junto a 30 mujeres que perdieron esposos, hijos, hermanos, fundaron la Asociación Nacional de Familiares de Detenidos, Desaparecidos y Secuestrados del Perú (ANFASEP). Este hecho, es un ejemplo de conquista de la ciudadanía de la mujer y a la vez una penosa radiografía del poder hegemónico que gobierna de espaldas a la mayoría de peruanos.