Durante su infancia, el autor residió en un internado religioso tan oscuro y lúgubre como en el que transcurre la acción de su nueva obra
"Me gusta atacar y reírme de esa forma tan estricta de educar a los niños", explicó Hoffman, que durante su infancia residió en un internado religioso tan oscuro y lúgubre como en el que transcurre la acción de su nueva obra.
Inspirada en la propia experiencia del autor, "La mano izquierda de Dios" narra las aventuras y desventuras de Thomas Cale, un adolescente que sueña con huir del Santuario de los Redentores.
"Cuando tenía diez años fui a un internado de muros muy altos en el que no estaban admitidas las mujeres", rememoró Hoffman acerca de aquellos "tiempos medievales" en los que apenas tuvo contacto con "el mundo moderno".
"Mientras los Beatles triunfaban en el exterior, yo sólo sabía de ellos una vez por semana, cuando los curas nos permitían ver la televisión durante una hora", ha afirmado el literato acerca de aquel "escenario violento" en el que los sacerdotes "hacían de todo con los niños salvo matarlos".
Ese ambiente de "continúa lucha psicológica y espiritual" tiñe por completo "La mano izquierda de Dios", un relato que por momentos "se abre al humor".
"Cuando los niños rezan no repiten lo que dicen los curas, sino que se mofan de esa educación tan dura cambiando las plegarias y haciéndolas más cómicas", relató Hoffman.
El novelista plasma ese lado tragicómico con otra anécdota: "Cuando era pequeño, mi madre me obligaba a confesarme bajo la amenaza de que, si no lo hacía, bajaría a los infiernos; pero con ocho años no se tienen pecados, así que me los inventaba".
En su mayor parte aciaga y sombría, "La mano izquierda de Dios" termina abrazando un paisaje bastante más esperanzador, acorde con la experiencia de Hoffman. "El colegio se volvió laico y entraron varias profesoras, entre ellas Faith Tolkien, la nuera del autor de "El señor de los Anillos"", aclaró.
La pedagoga salvó las distancias marcadas por el "extremadamente desagradable" Hoffman, consiguiendo que el estudiante se plantease su ingreso en la universidad. A pesar de un expediente "nefasto", el futuro escritor accedió a Oxford, donde se graduó en filología inglesa.
Tras muchos años trabajando como censor cinematográfico, Paul Hoffman lanzó en 2000 su primera novela, "The wisdom of crocodiles", que en sus páginas vaticinaba el actual colapso del sistema financiero.
"Una década atrás todo el mundo pensaba que la economía estaba llena de sabios, hombres que decían lo que iba a ocurrir basándose en métodos científicos, pero luego se ha demostrado que sus predicciones estaban basadas en una gran mentira, en un par de trucos, como el Mago de Oz", aseveró.
EFE
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