La mayor pérdida de empleo se observa en las zonas rurales, indica un estudio del Instituto Peruano de Economía (IPE).
En los últimos tres trimestres la economía peruana se enfrenta a una recesión, lo que viene deteriorando el empleo y ha dejado sin empleo a unos 125 mil trabajadores.
Para el Instituto Peruano de Economía (IPE) el empleo seguirá en terreno negativo en lo que resta del año y cerrará el 2023 con una caída de 0.7%, lo que sería su mayor retroceso en los últimos 20 años, sin contar el periodo de pandemia.
En esta proyección se tiene en cuenta la debilidad de la inversión privada, con cinco trimestres en negativo y con unas expectativas de contratación pesimistas en el corto plazo.
Actualmente la pérdida de puestos de trabajo refleja ante la caída de empleo en las zonas rurales, donde cerca de 170 mil personas dejaron de trabajar, principalmente en la agricultura pues el sector agro ha visto afectados sus niveles de producción ante la scasez de lluvias en la sierra centro-sur del país, las altas temperaturas en el norte y la crisis de fertilizantes durante la campaña 2022-2023.
Por su lado, en las zonas urbanas se observa que el empleo se encuentra estancado con un avance de solo 0.3% en lo que va del 2023 ante un menor número de trabajadores en actividades relacionadas con la inversión.
Según indica el IPE, se han reducido los empleos en construcción y manufactura, lo cual ha sido compensado por un incremento del empleo en sectores de consumos como el de comercio y servicios.
Además, el empleo ha retrocedido en 15 de las 26 principales ciudades del país. Actualmente la región más afectada es Puno, donde el empleo ha caído 11.2% luego de la paralización de actividades que se vivió debido los conflictos sociales de inicios de año.
Otro punto importante es que los hogares vienen experimentando una lenta recuperación de los ingresos laborales, pues en el último año los salarios ajustados por inflación a escala nacional se ubicaron aún 7.5% por debajo de lo alcanzado en el 2019.
¿Qué se espera para el 2024?
El IPE indica que el panorama laboral del 2024 dependerá de la velocidad en la que se reviertan los impactos que vienen sectores importantes, como la actividad agropecuaria.
Con una mayor producción nacional se generarían más inversiones y en consencuencia más empleos. Por ejempleo, con un crecimiento de 2.1% para el 2024, el empleo podría avanzar en 1.3%, cifra que aún sería inferior a lo alcanzado entre el 2001 y 2019.
Esto implica que si el Perú solo crecer 2.1% el próximo año, se generarían unos 65 mil puestos de trabajo menos de lo que se generó durante las dos décadas previas a la crisis del 2020.
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