La legendaria actriz italiana Cardinale abrió hoy las actividades del Festival Internacional de Cine de El Cairo, que se celebra entre el 11 y el 20 de noviembre.
La legendaria actriz Claudia Cardinale abrió hoy las actividades del Festival Internacional de Cine de El Cairo, que se celebra entre el 11 y el 20 de noviembre, rindiendo homenaje a su gran amigo y compañero, el actor egipcio Omar Sharif, fallecido hace cuatro meses.
Cardinale (Túnez, 1938) repasó ante la prensa sus recuerdos del icono del cine árabe, al que calificó de "amigo muy cercano" y persona "fantástica", y del que destacó que "siempre sonreía".
La actriz visitó Egipto anteriormente en muchas ocasiones, sola y acompañada de Sharif, y dijo estar "muy feliz" de poder regresar al país árabe, que calificó como "precioso".
Cardinale, luciendo una chaqueta americana de color fucsia, ofreció una caótica rueda de prensa en El Cairo, en la que fue intercalando el francés, el inglés y el italiano, e incluso se atrevió a pronunciar algunas palabras de árabe, idioma con el que está familiarizada.
Nacida en Túnez hace 77 años, Cardinale pasó revista también a sus memorias de juventud en ese país y de sus primeros pasos en el mundo del cine, cuando debutó en la película "Goha" (1958) junto a Omar Sharif.
"Me ofrecieron el papel y yo dije que no, porque no quería trabajar en el cine, pero fue mi padre el que dijo: '¿Y por qué no?'", relató.
Cardinale también recordó cómo apareció en el Festival de Cine de Cannes, en el que la película "Goha" fue premiada, vestida con un bikini y una bata tradicional tunecina, convirtiéndose en el centro de atención, ya que en Europa "todavía no se llevaba el bikini", explicó.
En ese momento, comenzó una prolífica carrera, protagonizando decenas de películas en los años 60 y 70 bajo la dirección de grandes nombres del cine como Fellini y Visconti, que ha seguido hasta el día de hoy. Más recientemente, participó en el film español "El artista y la modelo" (2012) de Fernando Trueba.
"Lo fantástico del cine es que puedes vivir muchas vidas (a través de él)", aseguró Cardinale, que ha apadrinado causas solidarias y es embajadora de buena voluntad de la Unesco desde 2000.
"Es importante ser la voz de gente que no puede hablar", subrayó la actriz, que se mostró muy coqueta ante las cámaras y aseguró no haberse sometido a ninguna operación estética.
Por otra parte, la estrella subrayó que, para que el cine egipcio y árabe pueda ser conocido y tener éxito, tiene que haber coproducciones con Europa y EE.UU., si no "solo se verán películas estadounidenses".
Por último, se refirió de nuevo a Omar Sharif, del cual no pudo despedirse antes de que falleciera de un ataque al corazón en El Cairo el pasado 10 de julio a los 83 años de edad.
"Intenté hablar con él, cuando ya estaba enfermo y se encontraba aquí en Egipto, pero no contestó el teléfono", dijo Cardinale.
EFE
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