Un 23 de julio, hace dos años, falleció la popular intérprete.
Un 23 de julio, hace dos años, Amy Winehouse fue encontrada sin vida en su casa de Londres cuando luchaba con todas sus fuerza contra su adicción a las drogas y al alcohol. Si bien todo apuntaba a que una sobredosis era la causante de su muerte, su familia insiste en que los informes toxicológicos indican que no había sustancias ilegales en su sangre. Es decir, todavía es un misterio su lamentable fallecimiento.
En la primera entrevista que Mitch Winehouse, padre de la cantante, concedió en televisión aportó nuevas pistas sobre la causa de la muerte de la intérprete. Según su versión, fue el duro proceso de desintoxicación lo que mató a Amy.
"Todo lo que hacía Amy lo hacía en exceso. Bebía en exceso y hacía la rehabilitación en exceso”, indicó en su momento el padre de la fallecida cantante.
Según Mitch Winehouse, los informes toxicológicos indicaron que había alcohol en su sangre, pero no está claro si contribuyeron a su muerte. Eso sí, dijo que los análisis revelaron trazas de Librium en su sangre, un medicamento que se administra para combatir la ansiedad y otros síntomas que se presentan en los alcohólicos en rehabilitación.
En ese sentido, su padre lamenta que Amy tratara de dejar el alcohol sin la ayuda de un profesional porque “los periodos de abstinencia eran cada vez más largos y los periodos en los que bebía eran cada vez más cortos”. “Estaba en la buena dirección”, agregó.
De otro lado, tras la muerte de Amy Winehouse, su disco “Back to Black” se convirtió en el más vendido de este siglo en el Reino Unido. Según Official Chart Company, el material publicado en 2006 vendió 3,25 millones en el Reino Unido y en todo el mundo ya supera los 15 millones de ejemplares.
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