Hay que darle la razón a Lucía de la Cruz: su ex no canta ni bingo pero igual aspira a que le extiendan un contrato como vocalista de orquesta cumbiambera.
Luisito, el ex acompañante de la cantante criolla Lucía de la Cruz, debutó como cantante de la mano de la Orquesta Candela en una sala de baile. Fue presentado por uno de los integrantes de la agrupación musical quien habló de “un nuevo talento”. Tras su actuación y ver las caras de los músicos parecía que alguno quería aplicarle una dosis del membrete de la orquesta.
El joven apareció en medio de los asistentes y subió al proscenio y poco después empezaron los acordes del conocido tema “Motor y motivo”. Luisito empezó a cantar pero de pronto y sin el menor rubor empezó a leer la letra de la canción anotada en un arrugado papel, según registraron las cámaras de “Magaly Tevé”.
A lo mejor podría atribuirse al nerviosismo del debut el recurso del papelito pero la verdad es que Luisito no nació para el canto. No tiene voz ni para cantar un bingo. Y había que ver la cara del corista que lo presentó pues tuvo que soplarse el número completo.
La única que lo aplaudió, pues el respetable pifió con todo derecho, fue una señorita mayor, rubia ella pero con las raíces negras, quien dijo ser la nueva pareja del ex galán de la criolla y que lo besó apasionadamente. Dijo ser vedette, anfitriona y modelo. Al final, el propio Luisito dijo que su nueva conquista era hija de un empresario que quería apoyar su carrera de cantante.
Luego de escuchar al desorejado solo queda una frase para esta historia: debut y despedida.
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