Barcelona goleó 4-0 al Elche en el partido de vuelta por los octavos de final de la Copa del Rey. El próximo rival del equipo de Luis Enrique será el Atlético de Madrid que eliminó al Real Madrid.
Barcelona logró la clasificación para los cuartos de final de la Copa de Rey, fase en la que se enfrentará al Atlético de Madrid, tras golear de nuevo al Elche (0-4) en una eliminatoria que quedó condicionada por la contundente victoria conseguida por el equipo catalán en el partido de ida (5-0).
El conjunto de Luis Enrique, repleto de jugadores poco habituales, ofreció una buena imagen ante un rival entregado, sobre todo en la primera parte, en la que dio todo tipo de facilidades a su rival. Rafinha, Sergi Roberto y, sobre todo, Adama, despedido por el público ilicitano con aplausos tras su sustitución, se reivindicaron ante su entrenador con una actuación notable.
Barcelona, dueño absoluto del balón, plasmó su dominio en el marcador de forma inesperada. Ante la ausencia de sus principales estrellas, el francés Jeremy Mathieu asumió la responsabilidad de lanzar una falta en la frontal del área, colocando el balón en la escuadra de la meta de Herrera, quien volvía equipo tras dos meses de lesión.
La segunda mitad comenzó animada, con acciones de peligro en las dos áreas. Montoya y Adama opositaron al cuarto gol, mientras Ter Stegen evitaba el tanto de Cristian Herrera en un alarde de sangre fía. También Coro tuvo el gol del honor en sus botas, pero no llegó por centímetros al pase de Edu Albacar.
El Elche, guiado por el argentino Fragapane, intentó mejorar su imagen y mostrar algo más de actitud, aunque el que estuvo más cerca del gol fue el croata Halilovic, quien estrelló el balón en el palo en sus primeros minutos en competición oficial con el Barcelona.
Ya en el descuento, Adriano, de cabeza, redondeó la goleada tras un gran centro de su compatriota Douglas y selló el pasaporte del Barcelona hacia los cuartos de final tras un incontestable 9-0 en el global de la eliminatoria.