El delantero de la Selección Peruana reveló detalles de cómo era la relación con sus padres cuando empezó a jugar fútbol de niño.
Paolo Guerrero ya pasó por primer mes de recuperación tras la rotura de ligamento cruzado que sufrió en su último partido y aprovechó para tener una conversación distendida vía Instagram y contar pasajes de su vida.
El 'Depredador', delantero de Inter de Porto Alegre, contó detalles de cómo era la relación con sus padres cuando se iniciaba en el fútbol siendo un niño.
"A mi mamá y a mi papá les tuve mucho respeto, siempre escuchaba, por más que yo fui un chico muy rebelde de niño, siempre traté de escucharlos y hacerles caso a lo que me decían", afirmó Guerrero en conversación con Angélica Noriega, una consultora educativa.
Asimismo, confesó cuáles eran los regaños de sus padres cuando, de niño, Guerrero tenía algunos malos partidos o se conformaba con el resultado.
"Mi papá siempre era muy duro con sus palabras, pero duro cuando tenía un mal partido o, por ejemplo, estábamos ganando por 2 o 3 a cero y yo ya no quería jugar. Él me decía 'todavía tienes tiempo para agarrar un libro'", sostuvo el delantero peruano.
"Para mí eso era lo peor que podía escuchar de mi papá y de mi mamá también. El otro día 'Cucurucho' dijo que cuando yo tenía un partido malo y no quería jugar, mi mamá era capaz de decirle o gritarle al entrenador 'sáquelo de la cancha, ya no quiere jugar'", agregó Guerrero.
Como se recuerda, Paolo Guerrero presenta una complicada lesión que lo alejará de la primera fecha doble de la Selección Peruana ante Paraguay y Brasil por las Eliminatorias rumbo a Qatar 2022.
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