Una sala de más de 900 metros cuadrados en las afueras de París abrirá sus puertas el 29 de septiembre en homenaje a la célebre BB
Brigitte Bardot y su controvertida vida personal y
profesional, la de una artista convertida en icono de la liberación de la mujer
y de lucha contra la hipocresía, es la figura sobre la que gira una exposición
presentada hoy en París.
Más de
La exposición, que cuenta con el apoyo de BB (siglas por las que se conoce a la
actriz francesa), presentará hasta el 31 de enero del próximo año los objetos
que han cedido coleccionistas, instituciones y artistas internacionales, así
como personalidades que marcaron la vida de la estrella, que cumplirá 75 años
la víspera de la apertura de la muestra.
Dividida en tres partes, propone un recorrido cronológico en la trayectoria de
Brigitte Bardot, acompañado en todo momento por su voz, a través de canciones y
extractos de documentos sonoros.
Una sucesión de salas temáticas bajo el título de una película, de una canción
o de una emisión de televisión, para retratar su vida, desde su infancia a su
compromiso por la causa animal, Saint-Tropez y sus amores, así como su carrera
profesional, con más de 50 películas y más de 80 canciones.
Fuente de inspiración para fotógrafos y artistas de todo el mundo, la muestra
refleja este aspecto de la intérprete de "Y Dios creó a la mujer" a
través de documentos de archivos, testimonios inéditos, objetos personales y
piezas de culto que revelan su influencia en la sociedad de esas décadas.
"Brigitte Bardot, los años despreocupados" está concebida, según sus
organizadores, como un viaje en el tiempo a una época de cambios.
El hilo conductor de la exposición dedicada a este icono de la belleza y la
sensualidad son sus 17 películas más importantes, de las que se muestran los
carteles originales, extractos, tráiler, así como entrevistas con los
directores de los filmes, que permiten perfilar el itinerario profesional de
"BB" entre 1952 y 1973.
Términos como "bardolatría" o "bardot-fobia" salpican la
retrospectiva de la actriz que emergió en una Francia austera y conservadora,
recogida en documentos fotográficos de la época, y en la que sus primeras
películas chocaron con una moral todavía de posguerra.
Habrá una reconstrucción del dormitorio de su infancia, en el seno de una
familia burguesa y acomodada, con un padre industrial, amante del cine, y una
madre fascinada por la moda y la danza, que llevaron a la actriz a interesarse
de manera temprana por el arte y admirar a estrellas de Hollywood como Marilyn
Monroe.
Con sólo 22 años y convertida ya en un icono sexual, llegó su primer papel
importante, la interpretación de Juliette Hardy en "Y Dios creó a la
mujer" (1962) dirigida por su marido Roger Vadim, a quien conoció siendo
menor de edad y con quien se casó en cuanto alcanzó la mayoría.
Un espacio especial está dedicado a las conquistas, sus cuatros maridos,
amantes y amigos de la "sex-symbol", que siempre defendió su derecho
para "hacer el amor cuando quería, sin sentir la menor vergüenza por
ello", recordó el comisario de la muestra, Henry-Jean Servat, en el
catálogo.
La relación de "BB" con la prensa, al copar portadas de revistas de
todo el mundo desde los 15 años, y con la publicidad, pues protagonizó campañas
para las firmas francesas L"Oréal o Renault, así como para Vespa, Lux o los
pantalones Karting, está presente en la exhibición de Boulogne-Billancourt.
En la década de los setenta decidió cambiar los escenarios para librar una
defensa a ultranza de los animales desde la fundación que creó en 1986,
declarada de utilidad pública por el Estado francés, y a la que dedica toda la
energía que en épocas anteriores empleó para remover las conciencias en otros
aspectos.
Es "la historia de una mujer que revolucionó las costumbres de su tiempo y
buscó sin cesar domar su época siguiendo siempre sus deseos y antojos",
concluye el escenógrafo de la exposición, Sylvain Roca.
EFE
Comparte esta noticia