Un paraíso en el cálido norte llamado Zorritos

A finales del siglo XIX era el centro de producción petrolera más importante de América del Sur, fue aquí donde se perforó el primer pozo tubular de petróleo, pero luego su nombre quedó rezagado por la misma historia, ahora Zorritos se abre paso más en el turismo por tener las mejores playas del norte del país, como la exclusiva Punta Sal.

Su gente, cálida como la arena fina y blanca de sus playas, celebra con regocijo un nuevo aniversario: son 69 años. El 25 de noviembre de 1942 fue creada como provincia con el nombre de Contralmirante Villar, capital Zorritos. 

Este hermoso balneario que baña el mar de Grau en forma de semiherradura se ubica a 26 kilómetros de la ciudad de Tumbes. Su temperatura promedio de 26 grados lo convierte en el predilecto de los veraneantes. 

Si se viaja desde Lima se llega primero al aeropuerto de Tumbes tras cerca de dos horas de vuelo. Luego cualquier servicio de transporte público o privado, quizás incluido en un paquete turístico, puede trasladarlo en 35 minutos. Y quienes prefieran el bus, habrá que esperar 19 horas y media para disfrutar de este paraíso. 

Quizás muchos se pregunten por qué el nombre de Zorritos. De dónde proviene. La historia popular nos cuenta que un grupo de ingleses y peruanos estaba reunido cuando de repente se aparecían unos zorros, que eran muy oriundos de la zona, pero que la civilización fue espantando.

Se dice que los ingleses los llamaban “zoritos” y que con el tiempo los lugareños empezaron a llamar esta tierra como Zorritos. 

PASADO, PRESENTE Y FUTURO PETROLERO

Más allá de lo peculiar del origen de este nombre, Zorritos empezó a cobrar importancia por la actividad petrolera. 

En 1864, la firma Peruvian Petroleum Company perforó tres pozos, con los cuales consiguió una producción de cerca de 500 barriles diarios, pero la explotación se paralizó tras el inicio de la Guerra del Pacífico.

Aquí también en la denominada quebrada Tucillal se perforó el primer pozo tubular de petróleo del Perú y de América del Sur.

En las laderas del río Tumbes se construyó una pequeña refinería, una de las primeras de Sudamérica, y posteriormente fue trasladada a Zorritos.

La actividad petrolera ha renacido en los últimos años y hay buenas expectativas que se siga desarrollando, incluso la empresa estadounidense BPZ Resources espera descubrir por esta zona un yacimiento de gas similar al de Camisea.

Por ahora, BPZ busca asociarse con alguna empresa para la explotación del lote Z1, en el Zócalo Continental donde tiene instalada una plataforma, frente a Zorritos.

SUS PLAYAS, LAS MEJORES

Pero esta provincia de 17.000 pobladores quiere avanzar más en turismo y tiene los atractivos para lograrlo, como sus playas desde caleta Grau hasta la paradisiaca Punta Sal. 

Este último balneario, en el distrito de reciente creación Canoas de Punta Sal, cuenta con una buena infraestructura hotelera. La superficie de su playa es muy irregular, llegando la marea alta hasta el borde de las casas ubicadas al sur del balneario. Es perfecta también para la práctica de deportes acuáticos.

Zorritos es más tranquilo que la bulliciosa Máncora, por lo que es ideal para un descanso placentero, pero eso no quiere decir que sea aburrido, también ofrece a sus visitantes variados lugares de diversión, de allí que se ha convertido en un excelente point de las fiestas de fin de año. Vaya reservando hotel.

VARIEDAD DE OPCIONES

No todo es playa, aunque es su mejor carta de presentación. Para quienes aman la naturaleza, por aquí se puede ingresar al Parque Nacional Cerros de Amotape, uno de los ecosistemas de bosques secos ecuatoriales mejor conservados en toda la región del Pacífico.

 A través de una carretera afirmada que nos lleva al bello distrito de Casitas, podemos adentrarnos al área natural protegida. Por aquí también llegaremos a conocer unas pozas de aguas termales y medicinales llamadas Los Hervideros. ¿Alguien se atreve a bañarse en lodo? Son lagunas curativas, nos aseguran.

Casitas, uno de los tres distritos que tiene esta provincia, resalta por ser un lugar eminentemente agrícola y acogedor que, sin duda, ayuda a recuperar las energías perdidas por la agitada vida citadina con su belleza paisajística. En el más recóndito de este paraje encontramos Los Pilares, que vuelve a la vida con cada lluvia.

Otro atractivo es El Tubo. Situado a 5 kilómetros de Zorritos, se trata de un tubo que dejaron los antiguos petroleros. Es una fuente termal de un tipo especial, sus aguas llegan a calentar tanto debajo de la tierra que estalla en vapor.

Y la gastronomía es la cereza de esta prometedora visita. Hay buenos lugares para disfrutar de una selecta carta de pescados y mariscos. El cebiche, la parihuela, el sudado, son impostergables de probar para quedar más prendado. 

Si te perdiste de conocer este destino turístico en el día de su aniversario, aún podrías evaluar la posibilidad de recibir en este lugar el 2012 y tienes todo el verano para gozar de relajantes vacaciones. La invitación está hecha.