El asesino de la menor de 11 años sufrió una descompensación durante la audiencia en la que se le dictó nueve meses de prisión preventiva.
César Alva Mendoza, asesino de una niña en San Juan de Lurigancho, sufrió una descompensación, según lo confirmaron los abogados de la familia Vellaneda, Julio Quintanilla y Marco Riveros. El primero, opinó que lo hizo para fugarse o quitarse la vida.
“Dentro de la audiencia ha fingido y se ha puesto mal. Pensamos que quería ir al baño y tirarse por la ventana o tratar de comer algo y atentar contra él”, dijo Quintanilla a su salida de la audiencia. "No ha habido ningún trastorno de carácter psicológico".
En un mes se conocería todo
Marco Riveros, también abogado de los deudos de Jimena, comentó que César Alva confesó el delito en la audiciencia; sin embargo, no es claro en cuento a los hechos, por ello, la jueza otorgó este domingo nueves meses de prisión preventiva para que se ahonde en las investigaciones.
"Para nuestra parte resultan ser más que suficientes (el tiempo de prisión preventiva), porque lo único que se va hacer es recabar los resultados de las pericias. Esto para mí no tardará más de un mes, luego el Ministerio Público puede solicitar la conclusión de la etapa de instrucción y recién ahí pasemos a un juicio oral que será evaluado por tres jueces superiores", comentó a RPP.
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