La dosis de refuerzo contra la COVID-19 se aplicará a todos los mayores de 18 años después de seis meses de recibir la segunda dosis, planteó la Comisión Permanente de Vacunación de Alemania.
La Comisión Permanente de Vacunación (Stiko) de Alemania recomendó este jueves la dosis de refuerzo de la vacuna contra la COVID-19 a todos los mayores de 18 años, pasados seis meses de la segunda dosis.
Hasta ahora, la Stiko solo recomendaba el tercer pinchazo a los mayores de 70 años, personas con inmunidad reducida y personal sanitario, aunque estaba previsto que se ampliase la sugerencia al resto de la población.
El jefe de la Comisión, Thomas Mertens, adelantó este martes en declaraciones a la cadena pública ZDF que este miércoles el organismo tomaría una decisión preliminar al respecto, aunque ésta aún debe ser refrendada por los grupos de trabajo regionales.
La nueva recomendación de la Stiko está en sintonía con el punto de vista del ministro de Sanidad en funciones, Jens Spahn, que lleva semanas llamando a la población a pedir cita para recibir una tercera dosis contra la COVID-19.
La Asociación de Médicos de Cabecera, por el contrario, insiste en que es necesario respetar el orden de prioridad para que los más vulnerables tengan acceso a la dosis de refuerzo contra la COVID-19 e incide en que para las personas jóvenes obtenerla no es urgente.
"Romper la ola"
Entretanto, el estado federado de Sajonia (este) adelantó este jueves duras medidas para "romper la ola" en esta región, que cuenta con la incidencia más alta de Alemania, así como con la tasa de vacunación más reducida contra la COVID-19.
El primer ministro sajón Michael Kretschmer se dirigió este jueves al parlamento regional, defendiendo el cierre de bares y discotecas y la prohibición total de grandes eventos, durante dos o tres semanas, aunque los detalles no serán anunciados de forma oficial hasta este viernes.
La incidencia acumulada a siete días en Sajonia asciende a 761,4 nuevas infecciones por cada 100 000 habitantes; le siguen a una cierta distancia los estados federados de Baviera (609,5), en el sur, y Turingia (565), en el este.
Kretschmer destacó una vez más la relación entre la elevada incidencia y la baja tasa de vacunación en Sajonia, donde solo el 57,6 % de la población cuenta con la pauta completa, el porcentaje más reducido del país.
El anuncio por parte del primer ministro sajón se produce después de que el coordinador hospitalario de este estado federado oriental, Michael Albrecht, solicitase un parón de la vida pública de 14 días para poner bajo control la cuarta ola de la pandemia de la COVID-19.
"Implemente un parón total durante 14 días. Déjennos tomar aire, déjennos ver, cómo se reduce entonces el desarrollo del número de casos," recomendó Albrecht, director médico del Hospital Universitario de Dresde, al primer ministro durante un debate online.
(Con información de EFE)
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