´No hemos podido detener el flujo´ de petróleo que mana del pozo a 1.500 metros de profundidad, declaró la empresa británica al tiempo de anunciar que probarán un nuevo método.
La petrolera British Petroleum (BP), responsable del derrame de petróleo en el Golfo de México, anunció hoy que la operación para cerrar el pozo averiado mediante una inyección de lodo no ha tenido éxito y pasará a intentar un nuevo método.
En una rueda de prensa, el director de operaciones de BP, Doug Suttles, indicó que la decisión de pasar al nuevo método, cubrir el pozo con una cúpula, se ha adoptado tras consultas con las autoridades federales.
"No hemos podido detener el flujo" de petróleo que mana del pozo a 1.500 metros de profundidad, declaró Suttles. "Hemos tomado la decisión de pasar a la siguiente opción", agregó.
Esa alternativa consiste en serrar la tubería rota y cubrir los restos con una cúpula, una solución similar a la que ya se intentó hace unos días sin éxito.
En sus declaraciones, el alto ejecutivo no pudo precisar qué porcentaje de éxito atribuye al próximo intento. Inicialmente, BP había calculado que las posibilidades de triunfo de la inyección de lodo se encontraban entre el 60 y el 70 por ciento.
"Tenemos confianza en que la operación funcionará, pero evidentemente no podemos garantizar el éxito", declaró Suttles.
La operación para intentar taponar el pozo mediante una inyección de materiales a presión ("top kill") comenzó el pasado miércoles.
El derrame se ha convertido en el peor de la historia, una vez que los científicos han corregido sus cálculos, que inicialmente contaban que la fuga equivalía a 5.000 barriles de petróleo al día, y ahora consideran que alcanza entre los 12.000 y los 19.000 barriles diarios.
Este derrame cumplió hoy su día número 40, tras comenzar a raíz de la explosión y hundimiento en el mar de la plataforma petrolera "Deepwater Horizon", que gestionaba British Petroleum, el 20 de abril.
EFE
En una rueda de prensa, el director de operaciones de BP, Doug Suttles, indicó que la decisión de pasar al nuevo método, cubrir el pozo con una cúpula, se ha adoptado tras consultas con las autoridades federales.
"No hemos podido detener el flujo" de petróleo que mana del pozo a 1.500 metros de profundidad, declaró Suttles. "Hemos tomado la decisión de pasar a la siguiente opción", agregó.
Esa alternativa consiste en serrar la tubería rota y cubrir los restos con una cúpula, una solución similar a la que ya se intentó hace unos días sin éxito.
En sus declaraciones, el alto ejecutivo no pudo precisar qué porcentaje de éxito atribuye al próximo intento. Inicialmente, BP había calculado que las posibilidades de triunfo de la inyección de lodo se encontraban entre el 60 y el 70 por ciento.
"Tenemos confianza en que la operación funcionará, pero evidentemente no podemos garantizar el éxito", declaró Suttles.
La operación para intentar taponar el pozo mediante una inyección de materiales a presión ("top kill") comenzó el pasado miércoles.
El derrame se ha convertido en el peor de la historia, una vez que los científicos han corregido sus cálculos, que inicialmente contaban que la fuga equivalía a 5.000 barriles de petróleo al día, y ahora consideran que alcanza entre los 12.000 y los 19.000 barriles diarios.
Este derrame cumplió hoy su día número 40, tras comenzar a raíz de la explosión y hundimiento en el mar de la plataforma petrolera "Deepwater Horizon", que gestionaba British Petroleum, el 20 de abril.
EFE
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