El Tribunal de Justicia de Sao Paulo, Brasil, determinó que la adopción causó daños psicológicos en el pequeño que tenía seis años cuando fue adoptado por la familia.
El Tribunal de Justicia de Sao Paulo determinó que un niño brasilero que fue adoptado y devuelto por su familia adoptiva un año y medio después sufrió daño moral y psicológico, por lo que la pareja deberá pagar 150 mil reales (aproximadamente US$27 mil) a modo de compensación.
Fue el Ministerio Público el que llevó el caso a los tribunales, con el argumento de que la retirada de la adopción causó en el niño daños psicológicos, ya que tenía solo seis años cuando fue acogido por la familia.
En un inicio, la pareja aseguró que buscaba darle una buena condición de vida, sin embargo, posteriormente aseguró que el pequeño era “rebelde” y que tenía un comportamiento “agresivo, desafiante e imprudente”. Luego de que la indemnización fuera confirmada por el Tribunal de Justicia de Sao Paulo los padres adoptivos anunciaron que recurrirían a los tribunales superiores, pues no creen que hayan dañado al menor.
¿Qué pasó con el niño?
El policía militar y la médico que adoptaron al menor fueron incluidos en el Registro Nacional de Adopciones en mayo del 2013, luego de recibir una opinión favorable de los tribunales. Padres de un hijo biológico, adujeron que buscaban expandir su familia.
El pequeño que fue adoptado vivía en un hogar para menores en el interior de Sao Paulo y tenía cinco años cuando sus padres biológicos perdieron su custodia y la de sus hermanos. A los seis años comenzaron las visitas de sus padres adoptivos y, finalmente, el tribunal otorgó su custodia a la pareja, pues entendieron que se habían creado vínculos emocionales entre ellos.
Años más tarde, la familia indicó que los lazos afectivos “se redujeron” por lo que, en junio del 2017, decidieron “devolver” al menor. Según el expediente, el niño niño "llegaba a la casa con pánico por la lluvia, dormía mal, sin hábitos educados, sin hacer su limpieza personal, además de ser descuidado con sus objetos personales, desinteresado en las tareas escolares, con dificultad para aceptar reglas, así como con la costumbre de mentir para lograr sus objetivos y evitar el castigo".
El tribunal terminó por aceptar la solicitud y César fue llevado con un tutor para que cuidara de él, pero el Ministerio Público presentó una demanda contra sus padres adoptivos en el Tribunal de la Niñez y Juventud de Atibaia, argumentando que los padres lo trataron de manera distinto en comparación a su hijo biológico.
El niño, además, fue trasladado a una escuela municipal, mientras que el hijo biológico de la pareja se mantuvo en un colegio privado. Además, el expediente revela que los padres viajaron a Brasil con su hijo biológico, mientras que César se quedó en Brasil debido a que era rebelde. Según el Ministerio Público, la madre también le administró Ritalin y Risperidona, a pesar de que el menor no pasó por ninguna consulta psiquiátrica ni psicológica.
"Tales comportamientos denotan que los acusados no acogieron genuinamente al niño en su familia, haciendo una clara distinción en el tratamiento con el niño biológico, incluso tomando la decisión drástica de devolverlo, sin tener en cuenta los sentimientos del niño y sin tener ninguna preocupación por la condición de un niño en desarrollo", señalò el fallo de la jueza Marcia Dalla Déa Barone, del TJSP.
Al momento del traslado, el menor se mostró enojado y triste. Después de vivir con el tutor por unos meses y tener apoyo psicológico, el expediente señala que empezó a mostrar "un comportamiento favorable y ejemplar, siendo afectuoso, sociable y pacífico", por lo que el tutor solicitó su adopción.
Los niños que vuelven
En Brasil, la justicia considera que la adopción de niños es irrevocable, no obstante, de acuerdo con la BBC, las solicitudes de padres que desean cancelar adopciones generalmente son aceptadas para evitar que el niño pueda encontrarse en una familia en donde no es aceptado ni querido.
Estos casos, sin embargo, pueden ser objeto de demandas con indemnizaciones, de modo que se repare el daño causado en el menor. Desde agosto del 2019 hasta el 13 de enero del 2020 se cancelaron 73 adopciones el Brasil, de acuerdo con el Sistema Nacional de Adopción y Recepción (SNA), que todavía no cuenta con una base de datos general de niños que han sido devueltos luego d que la familia haya completado el proceso de adopción.
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