Una concentración pacífica, frente al edificio de Caracol Radio, a la que también acudieron representantes de los medios de comunicación y de organizaciones sociales e internacionales.
Cerca de dos centenares de personas se concentraron ante el edificio que alberga las sedes de Caracol Radio, del grupo español Prisa, y la Agencia Efe en Bogotá, en rechazo por el atentado terrorista que este jueves causó una gran conmoción en todo el país y cuantiosos daños materiales.
Con pancartas que rezaban distintos lemas en contra de la violencia, decenas de ciudadanos fueron congregándose desde las seis de la tarde frente al edificio, en respuesta a una convocatoria popular que fue extendiéndose sobre todo por las redes sociales de Internet y distintos medios de comunicación.
Una concentración pacífica a la que también acudieron representantes de los medios de comunicación y de organizaciones sociales e internacionales, entre ellos el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Colombia, Christian Salazar.
También acudieron a la concentración Esteban y Martín Santos, hijos del presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, quienes se enteraron de la convocatoria a través de Twitter.
"Estos eventos terroristas no nos van amilanar, no nos van a intimidar, y aquí de lo que se trata es de mostrar la fortaleza, la serenidad y sobre todo el carácter y pujanza del pueblo colombiano", explicó el alcalde de Bogotá, Samuel Moreno, que acudió a apoyar la concentración.
A su juicio, "el mensaje que quieren dar los bogotanos es que rechazan la violencia, rechazamos estas acciones, no nos gusta esta forma de proceder de los violentos", añadió Moreno.
Una protesta pacífica que conforme fue oscureciendo fue llenándose de velas, aunque el lugar seguía iluminado con los destellos de los vehículos de bomberos y de policía que aún permanecían en la zona.
El atentado, perpetrado a las 05.30 hora local del jueves (10.30 GMT) con un vehículo que contenía 50 kilogramos de explosivo anfo, provocó cuantiosos daños materiales en varios edificios de la zona afectada, donde hay muchas viviendas y oficinas, entre ellas las sedes de la emisora Caracol Radio y la Agencia EFE.
Según el último balance de las autoridades, un total de 808 personas fueron afectadas, de las que 36 resultaron heridas, aunque todas ya fueron dadas de alta, y en 424 viviendas se registraron daños a consecuencia del atentado.
La explosión, que no provocó una tragedia mayor porque a esa hora apenas había gente en la calle y todavía no habían abierto las oficinas, conmocionó a los bogotanos, pues desde octubre de 2006 no se producía un atentado con bomba en la ciudad.
En el lugar del atentado hay un complejo formado por un edificio principal y dos anexos, todos ellos dedicados a oficinas, donde tienen sus sedes empresas, despachos de abogados y consultoras, muchas de ellas extranjeras.
Caracol Radio, del español Grupo Prisa, está situada en el edificio principal, que resultó muy dañado, y la Agencia Efe en dos plantas de uno de los anexos, que resultaron indemnes.
El atentado no ha sido reivindicado por ahora, por lo que se desconoce si sus autores tenían un objetivo preciso.
EFE
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