¿Por qué se complica el rescate de un niño que cayó a un pozo en España?

La operación de búsqueda de Julen, el niño de dos años atrapado desde el domingo en un pozo estrecho y profundo en el sur de España, continuaba este jueves con la esperanza cada vez más débil de encontrarlo con vida.

Tratando de llegar a él, las autoridades excavan un túnel vertical en paralelo al pozo de 25 centímetros de diámetro y más de 100 metros de profundidad donde cayó el pequeño el domingo cuando jugaba cerca de donde sus padres almorzaban en la sierra de Totalán, Andalucía.

Un tapón de piedras y tierra a unos 70 metros de profundidad en el pozo abandonado impide a los rescatistas, entre ellos bomberos, ingenieros y empresarios expertos en excavación, llegar al niño, del que se sospecha se encuentra atrapado bajo ese obstáculo.

Operación de rescate

La operación contrarreloj, que mantiene en vilo a España, incluye cavar otro túnel en dirección oblicua en la montaña, para intentar llegar a donde se supone está Julen, pero la naturaleza del terreno complica las labores.

En el túnel "vertical se está avanzando de una forma de momento sin mayor problemática", declaró a la prensa el ingeniero Juan López que participa en las labores de búsqueda, pero el otro presenta "problemas". Desde el domingo no se han tenido señales de que el niño sigue con vida.

Entre las numerosas empresas que colaboran en la búsqueda de Julen está SPT (Stockholm Precision Tools), la compañía sueca que ayudó en el rescate de los 33 mineros chilenos que estuvieron atrapados 70 días bajo tierra en 2010, y que ha aportado un geolocalizador.

Encuentran cabellos del niño en pozo

Los equipos de rescate encontraron pelo del niño de dos años que se encuentra atrapado desde el domingo en un estrecho pozo en el sur de España, brindando la esperanza de que se esté cerca de hallarlo, indicaron autoridades este miércoles.

Esta es la primera prueba de que efectivamente Julen se encuentra en el pozo de 25 cm de diámetro y más de 100 metros de profundidad, donde trabajan numerosos efectivos desde el domingo sin descanso y contrarreloj, en un caso que ha atrapado la atención de los españoles.

"Se encontró un poco de pelo [en el pozo] y las pruebas que se realizaron por parte de la Guardia Civil, de ADN, certifican que es del niño", explicó a la radio cadena Ser el delegado del gobierno español en Andalucía, Alfonso Rodríguez Gómez.

No pierden las esperanzas 

El padre de Julen, José Roselló, declaró a la prensa que su esposa y él están "muertos" por la situación, aunque mantienen la "esperanza" de rescatar con vida al pequeño. La pareja sufrió la muerte de otro hijo pequeño en 2017 debido a una enfermedad.

Los padres no pierden las esperanzas de que siga con vida y han hecho un llamado a no parar "hasta que saquemos al niño de ahí dentro".

La desesperada operación recordó otros dos casos similares anteriores: el de Alfredo Rampi, un niño italiano de seis años que fue hallado muerto tras caer en un pozo cerca de Roma en 1981, o el de Jessica McClure, una bebé de 18 meses rescatada viva en octubre de 1987 tras 57 horas en el fondo de un pozo en Texas.

(Con información de AFP y EFE)