El enorme hoyo de 21,5 metros de diámetro y 31,2 de profundidad se abrió en el norte de la capital por las lluvias causadas por la tormenta tropical ´Agatha´.
Geólogos de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) empezaron a investigar el enorme hoyo de 21,5 metros de diámetro y 31,2 de profundidad que se abrió el pasado sábado en el norte de la capital guatemalteca por las lluvias causadas por la tormenta tropical "Agatha".
El secretario de la Conred, Alejandro Maldonado, junto a un grupo de periodistas visitó hoy el lugar, conocido como Ciudad Nueva, donde los geólogos iniciaron un estudio para conocer la situación del subsuelo y establecer las verdaderas causas de la formación del hoyo.
Los geólogos han descartado, en principio, que existan cavernas en el interior, aunque aclararon que la presencia de arena volcánica en los alrededores de la abertura no les permitió hoy realizar un estudio completo.
Según las autoridades, el gigantesco orificio fue el resultado de una carga excesiva de agua en el terreno, originada por las torrenciales lluvias de la tormenta tropical que azotó el pasado fin de semana Guatemala, con el resultado de más de 150 muertos.
Maldonado explicó que los vecinos habían alertado a la Conred en febrero pasado de que se escuchaba retumbar en el sitio y que se habían abierto grietas en casas.
El agujero se tragó una residencia de tres niveles donde funcionaba una fábrica de ropa, pero los trabajadores ya no estaban en el lugar al momento del hundimiento.
Las autoridades, que no tienen conocimiento de víctimas por ese fenómeno, señalaron que en el lugar del hundimiento existe un colector del sistema de drenajes de la capital guatemalteca.
El Colegio de Ingenieros de Guatemala ha señalado que la formación de esos agujeros se debe a la falta de mantenimiento de los colectores, cuya responsabilidad es de la Municipalidad capitalina.
Las autoridades evacuaron a por lo menos 60 personas de residencias cercanas al hoyo y pese a la situación de vulnerabilidad y alto riesgo, los habitantes de otras 50 viviendas no muestran voluntad de querer abandonar sus casas.
La Conred mantiene una zona de prevención y restricción de 100 metros alrededor del hundimiento y sólo permiten el ingreso de algunos habitantes que buscan sacar algunos bienes de sus viviendas.
EFE
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