Los restos, que corresponden a tres hombres, se hallaban distribuidos en cuatro bolsas de plástico. Una llamada anónima permitió localizar los cuerpos.
Tres cuerpos descuartizados metidos en bolsas de plástico negras fueron hallados hoy en Morelia, capital del estado de Michoacán, informó hoy la Procuraduría General de Justicia estatal (fiscalía).
Una llamada anónima permitió localizar los cuerpos, tirados en una zona de clase media de la capital de Michoacán, estado que sirve de base para el cartel de La Familia, uno de los seis principales de México.
Los restos, que corresponden a tres hombres, se hallaban distribuidos en cuatro bolsas de plástico. Por el momento no se ha establecido otro detalle sobre la identidad de los asesinados.
Ayer fueron localizados en un automóvil seis cuerpos decapitados, al este de la misma ciudad, ubicada a 308 kilómetros al oeste de Ciudad de México, y que a finales de enero se produjo otro hallazgo similar, con idéntico número de cadáveres sin cabeza, en otra población michoacana.
La violencia extrema ha sido habitual en las acciones de los carteles de la droga, aunque particularmente en los estados de Guerrero y Michoacán son más comunes los hallazgos de cuerpos descuartizados.
Esos territorios se los disputan varios carteles (La Familia, el Golfo y Beltrán Leyva) y se presume que la mayoría de sucesos violentos de esta clase corresponden a enfrentamientos por el control de la zona.
Desde hace años, el crimen organizado mexicano combate entre sí para hacerse con la distribución interna de droga.
Desde diciembre de 2006, se estima que la delincuencia organizada ha sido responsable en México de más de 17.000 asesinatos.
Asimismo, a primera hora de hoy, fue "levantado" (secuestrado por un grupo criminal sin que se pida rescate a cambio, habitualmente para matarlo) el jefe de seguridad de la cárcel de Chilpancingo, capital del vecino estado de Guerrero, informó la Secretaría de Seguridad Pública estatal.
El funcionario viajaba en una camioneta 4x4 junto a otras cuatro personas de seguridad de la prisión, cuando fueron interceptados por un comando armado de siete individuos, que se llevaron al responsable de la seguridad carcelaria.
Sus acompañantes fueron golpeados, sin mayores consecuencias, y los atacantes huyeron a bordo de la camioneta donde viajaba el funcionario.
EFE
Una llamada anónima permitió localizar los cuerpos, tirados en una zona de clase media de la capital de Michoacán, estado que sirve de base para el cartel de La Familia, uno de los seis principales de México.
Los restos, que corresponden a tres hombres, se hallaban distribuidos en cuatro bolsas de plástico. Por el momento no se ha establecido otro detalle sobre la identidad de los asesinados.
Ayer fueron localizados en un automóvil seis cuerpos decapitados, al este de la misma ciudad, ubicada a 308 kilómetros al oeste de Ciudad de México, y que a finales de enero se produjo otro hallazgo similar, con idéntico número de cadáveres sin cabeza, en otra población michoacana.
La violencia extrema ha sido habitual en las acciones de los carteles de la droga, aunque particularmente en los estados de Guerrero y Michoacán son más comunes los hallazgos de cuerpos descuartizados.
Esos territorios se los disputan varios carteles (La Familia, el Golfo y Beltrán Leyva) y se presume que la mayoría de sucesos violentos de esta clase corresponden a enfrentamientos por el control de la zona.
Desde hace años, el crimen organizado mexicano combate entre sí para hacerse con la distribución interna de droga.
Desde diciembre de 2006, se estima que la delincuencia organizada ha sido responsable en México de más de 17.000 asesinatos.
Asimismo, a primera hora de hoy, fue "levantado" (secuestrado por un grupo criminal sin que se pida rescate a cambio, habitualmente para matarlo) el jefe de seguridad de la cárcel de Chilpancingo, capital del vecino estado de Guerrero, informó la Secretaría de Seguridad Pública estatal.
El funcionario viajaba en una camioneta 4x4 junto a otras cuatro personas de seguridad de la prisión, cuando fueron interceptados por un comando armado de siete individuos, que se llevaron al responsable de la seguridad carcelaria.
Sus acompañantes fueron golpeados, sin mayores consecuencias, y los atacantes huyeron a bordo de la camioneta donde viajaba el funcionario.
EFE
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