Esta medida permitirá evitar la hospitalización y muerte de miles de personas al año a causa del excesivo consumo alcohol, destaca el Ministerio de Sanidad inglés.
El Gobierno británico quiere establecer un precio mínimo sobre el alcohol para impedir los descuentos en las ventas de ciertas bebidas y reducir así su excesivo consumo, señala hoy el periódico The Dialy Telegraph.
La medida forma parte de un plan del Ministerio de Sanidad destinado a atajar este problema y que formará parte del programa electoral del Partido Laborista del primer ministro británico, Gordon Brown, de cara a las elecciones generales, que deberán convocarse como muy tarde el próximo mes de junio.
Con esta medida, se verá duplicado el coste de ciertas bebidas que los supermercados venden a precios reducidos, aunque no afectará a las que se venden en "pubs" (bares) y restaurantes, puesto que los precios ya son altos, resalta el diario británico.
El establecimiento de un precio mínimo permitirá evitar la hospitalización y muerte de miles de personas al año a causa del excesivo consumo de bebidas alcohólicas.
El plan supone un cambio en la política de Brown, puesto que hasta ahora se había opuesto a establecer un precio mínimo. "Nunca hemos evitado tomar decisiones firmes en materia de salud pública", señaló al rotativo el ministro de Sanidad, Andy Burnham.
"Necesitamos equilibrar el derecho de la gente a beber de manera responsable frente a las personas que compran bebidas a precios ridículos y salen y se hacen daño", agregó el ministro.
-EFE-
La medida forma parte de un plan del Ministerio de Sanidad destinado a atajar este problema y que formará parte del programa electoral del Partido Laborista del primer ministro británico, Gordon Brown, de cara a las elecciones generales, que deberán convocarse como muy tarde el próximo mes de junio.
Con esta medida, se verá duplicado el coste de ciertas bebidas que los supermercados venden a precios reducidos, aunque no afectará a las que se venden en "pubs" (bares) y restaurantes, puesto que los precios ya son altos, resalta el diario británico.
El establecimiento de un precio mínimo permitirá evitar la hospitalización y muerte de miles de personas al año a causa del excesivo consumo de bebidas alcohólicas.
El plan supone un cambio en la política de Brown, puesto que hasta ahora se había opuesto a establecer un precio mínimo. "Nunca hemos evitado tomar decisiones firmes en materia de salud pública", señaló al rotativo el ministro de Sanidad, Andy Burnham.
"Necesitamos equilibrar el derecho de la gente a beber de manera responsable frente a las personas que compran bebidas a precios ridículos y salen y se hacen daño", agregó el ministro.
-EFE-
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