La pequeña de 11 años fingió estar muerta al interior de su salón de clases, cuando ocurría el tiroteo masivo que dejó sin vida a 19 alumnos y dos maestras.
En una entrevista exclusiva con CNN, Miah Cerrillo, de 11 años, relató lo que tuvo que vivir el pasado 25 de mayo en la escuela primaria Robb en Uvalde, Texas, fecha en la que Salvador Ramos asesinó a tiros a 19 estudiantes y dos maestras.
Cerrillo ha relatado que, por temor a que el asesino regresara y la asesinara, se untó con la sangre de uno de sus compañeros de clase y se hizo pasar por muerta.
La tía y madrina de la niña ha contado que Irma García, una de las dos maestras asesinadas, era la profesora de su sobrina. Sus compañeros de clase también fueron atacados ese día.
“Mía se untó un poco de sangre en el cuerpo para fingir que estaba muerta. Vio a su amiga llena de sangre y se la puso”, relató la tía de la pequeña a CNN.
La menor fue llevada al hospital luego del suceso, sin embargo, solo resultó con heridas leves. Actualmente Miah ya fue dada de alta y se encuentra con sus familiares.
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