El Gobierno brasileño prohibió por completo la publicidad del tabaco, además de elevar los impuestos sobre los cigarrillos; y hace dos años entró en vigencia la Ley Seca.
El porcentaje de brasileños que fuma cayó desde el 16,2% en 2006 hasta el 15,5% en 2009, pero el de los que admite abusar de la bebida alcohólica subió desde el 16,2% hasta el 18,9% en el mismo período, según un estudio divulgado hoy por el Ministerio de Salud.
Mientras que el 19% de los hombres fuma, ese porcentaje se reduce para el 12,5% entre las mujeres, de acuerdo con el informe Vigilancia de Factores de Riesgo y Protección para Enfermedades Crónicas, realizado anualmente desde 2006 y que el año pasado consultó telefónicamente a 54.000 adultos.
El índice de brasileños que fuma es muy inferior al de países como Argentina (35%) y Estados Unidos (40%), de acuerdo con los datos citados por el Ministerio de Salud en un comunicado.
El porcentaje de dependientes de la nicotina viene cayendo gradualmente en Brasil desde el 33% de 1989, cuando el Ministerio de Salud inició una serie de campañas para combatir el consumo de tabaco.
"Brasil es uno de los países con mayor éxito en su campaña de combate al tabaquismo. Fue una caída muy expresiva del número de fumadores en un tiempo muy corto", conmemoró la coordinadora de Vigilancia de Enfermedades No Transmisibles del Ministerio de Salud, Deborah Malta.
Además de haber prohibido por completo la publicidad del tabaco, el Gobierno brasileño elevó los impuestos sobre los cigarrillos y obligó a los fabricantes a estampar en las cajetillas fotografías de gran impacto que advirtiesen sobre los riesgos de fumar.
El Ministerio de Salud también apoyó las leyes aprobadas en diferentes estados y ciudades que prohíben el tabaco en espacios colectivos, incluyendo bares, empresas y medios de transporte, e impulsa en el Congreso una ley que prohíbe los espacios aislados que algunas empresas aún destinan a quienes desean fumar.
Pese a la reducción del tabaquismo, se elevó hasta un 18,9%, casi la quinta parte de la población, el porcentaje de brasileños que admite abusar del alcohol, es decir que dice beber cinco o más dosis de alcohol en la misma oportunidad al menos una vez al mes.
El porcentaje de abuso de alcohol varía desde el 28,8% entre los hombres y el 10,4% entre las mujeres.
El índice de hombres brasileños que abusa del alcohol supera al de países como Chile (17%), EE.UU. (15,7%) y Argentina (14%).
"Ese nivel de consumo de alcohol es bastante elevado y preocupante, ya que es factor de riesgo para accidentes de tráfico, violencia y enfermedades", según Malta.
"Pero ese abuso no siempre es reconocido debido a que el alcohol está presente en la cultura brasileña y asociado a la diversión y al festejo", agregó la funcionaria.
Según el estudio, el consumo abusivo de alcohol es más frecuente en jóvenes de entre 18 y 24 años (23%) y va disminuyendo gradualmente hasta el 10,5% entre quienes tienen entre 55 y 64 años.
El Gobierno también se ha esforzado por combatir el consumo de alcohol con legislaciones como la que prohíbe la publicidad de cervezas y eleva los costos de las bebidas.
Igualmente impulsó la aprobación de la llamada "Ley Seca", que redujo a cero la tolerancia con los conductores que consumen bebidas alcohólicas, a los que les son impuestos elevadas multas y sanciones como la pérdida de la licencia para conducir.
Según el Ministerio de Salud, la Ley Seca, que entró en vigor hace dos años, permitió una reducción del 6,2% en el número de accidentes en el país apenas en los últimos doce meses.
"Ese índice representa 2.302 muertes menos en todo el país", afirma el Ministerio en su nota.
"Pero necesitamos avanzar en el marco regulador del alcohol de la misma forma que lo hicimos con el tabaco. Es necesario proteger vidas", afirmó Malta. EFE
Mientras que el 19% de los hombres fuma, ese porcentaje se reduce para el 12,5% entre las mujeres, de acuerdo con el informe Vigilancia de Factores de Riesgo y Protección para Enfermedades Crónicas, realizado anualmente desde 2006 y que el año pasado consultó telefónicamente a 54.000 adultos.
El índice de brasileños que fuma es muy inferior al de países como Argentina (35%) y Estados Unidos (40%), de acuerdo con los datos citados por el Ministerio de Salud en un comunicado.
El porcentaje de dependientes de la nicotina viene cayendo gradualmente en Brasil desde el 33% de 1989, cuando el Ministerio de Salud inició una serie de campañas para combatir el consumo de tabaco.
"Brasil es uno de los países con mayor éxito en su campaña de combate al tabaquismo. Fue una caída muy expresiva del número de fumadores en un tiempo muy corto", conmemoró la coordinadora de Vigilancia de Enfermedades No Transmisibles del Ministerio de Salud, Deborah Malta.
Además de haber prohibido por completo la publicidad del tabaco, el Gobierno brasileño elevó los impuestos sobre los cigarrillos y obligó a los fabricantes a estampar en las cajetillas fotografías de gran impacto que advirtiesen sobre los riesgos de fumar.
El Ministerio de Salud también apoyó las leyes aprobadas en diferentes estados y ciudades que prohíben el tabaco en espacios colectivos, incluyendo bares, empresas y medios de transporte, e impulsa en el Congreso una ley que prohíbe los espacios aislados que algunas empresas aún destinan a quienes desean fumar.
Pese a la reducción del tabaquismo, se elevó hasta un 18,9%, casi la quinta parte de la población, el porcentaje de brasileños que admite abusar del alcohol, es decir que dice beber cinco o más dosis de alcohol en la misma oportunidad al menos una vez al mes.
El porcentaje de abuso de alcohol varía desde el 28,8% entre los hombres y el 10,4% entre las mujeres.
El índice de hombres brasileños que abusa del alcohol supera al de países como Chile (17%), EE.UU. (15,7%) y Argentina (14%).
"Ese nivel de consumo de alcohol es bastante elevado y preocupante, ya que es factor de riesgo para accidentes de tráfico, violencia y enfermedades", según Malta.
"Pero ese abuso no siempre es reconocido debido a que el alcohol está presente en la cultura brasileña y asociado a la diversión y al festejo", agregó la funcionaria.
Según el estudio, el consumo abusivo de alcohol es más frecuente en jóvenes de entre 18 y 24 años (23%) y va disminuyendo gradualmente hasta el 10,5% entre quienes tienen entre 55 y 64 años.
El Gobierno también se ha esforzado por combatir el consumo de alcohol con legislaciones como la que prohíbe la publicidad de cervezas y eleva los costos de las bebidas.
Igualmente impulsó la aprobación de la llamada "Ley Seca", que redujo a cero la tolerancia con los conductores que consumen bebidas alcohólicas, a los que les son impuestos elevadas multas y sanciones como la pérdida de la licencia para conducir.
Según el Ministerio de Salud, la Ley Seca, que entró en vigor hace dos años, permitió una reducción del 6,2% en el número de accidentes en el país apenas en los últimos doce meses.
"Ese índice representa 2.302 muertes menos en todo el país", afirma el Ministerio en su nota.
"Pero necesitamos avanzar en el marco regulador del alcohol de la misma forma que lo hicimos con el tabaco. Es necesario proteger vidas", afirmó Malta. EFE
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