En los últimos días, dirigentes sociales de Bolivia censuran las acciones del Gobierno peruano y han reclamado asilo para los líderes involucrados en los enfrentamientos.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, calificó el conflicto ocurrido en la Amazonía peruana, en el que murieron 24 policías y 10 indígenas de ese país, según el Gobierno de Lima, como "el genocidio del TLC (Tratado de Libre Comercio)".
"Lo que pasó en Perú, yo estoy convencido, es el genocidio del TLC, la privatización, la entrega de las selvas amazónicas de Suramérica a las trasnacionales", sostuvo Morales en el acto de clausura de un encuentro de indígenas en el departamento del Beni (noreste).
En alusión al mismo tema, el presidente boliviano recordó que la guerra del Chaco que Bolivia y Paraguay libraron entre 1932 y 1935 no ha sido un conflicto entre ambos países, sino "entre dos empresas petroleras trasnacionales".
Ahora, según dijo, ya no son las trasnacionales las que vienen "a hacer guerra" sobre los recursos naturales, sino los TLC que practican "el genocidio sobre Latinoamérica".
El mandatario boliviano recordó que la nueva Constitución de su país, promulgada en febrero pasado, establece que se debe consultar a los nativos sobre la explotación de recursos naturales en sus territorios.
Por su parte, los originarios de tierras bajas que estuvieron en el evento lamentaron lo ocurrido en el Perú y guardaron un minuto de silencio por los indígenas que murieron en los enfrentamientos en la Amazonía de ese país.
El conflicto peruano de Bagua ha supuesto un nuevo elemento de tensión en las relaciones entre La Paz y Lima, después de que congresistas peruanos vincularan el origen del suceso violento con una carta enviada por Evo Morales a la cumbre indígena celebrada en Puno en mayo pasado.
El Ejecutivo boliviano ha rechazado estas acusaciones y señalado que el conflicto es un asunto interno del Perú, aunque en un primer momento la ministra de Justicia, Celima Torrico, responsabilizó al presidente Alan García del conflicto.
En los últimos días, dirigentes sociales afines a Morales han insistido en esta línea censurando las acciones del Gobierno de García e incluso, algunos han reclamado asilo para los líderes peruanos involucrados en el enfrentamiento.
-EFE
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