La muerte de un joven estudiante de veinte años eleva a siete el número de fallecidos en la tragedia, ocurrida el pasado 13 de diciembre en Bélgica.
La muerte hoy de un joven estudiante de veinte años tras permanecer diez días en coma eleva a siete el número de fallecidos en la matanza de Lieja (este de Bélgica), un trágico suceso que provocó una gran conmoción en el país.
Nordine Amrani, belga de 33 años y con un amplio expediente criminal, sembró el pánico el pasado martes 13 de diciembre en una concurrida plaza de Lieja al abrir fuego de manera incriminada contra los viandantes, tras lo cual se suicidó de un disparo en la cabeza.
El veinteañero fallecido hoy había resultado herido de gravedad por una granada y permanecía en estado crítico desde entonces, hasta que su salud empeoró ayer, según informa la agencia de noticias Belga.
Con la muerte del estudiante, la cifra total de fallecidos se eleva hasta siete: cinco viandantes víctimas del ataque de la céntrica plaza Saint Lambert, el propio Amrani y otra mujer hallada muerta en la casa del asesino, quien habría recibido un tiro momentos antes de la matanza.
EFE
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