Enterrado a unos 50 centímetros bajo tierra en un túmulo que recubre una sepultura, el barco vikingo de Gjellestad fue detectado en 2018 gracias a un georradar.
Noruega comenzó el viernes a desenterrar un barco vikingo, el primero que será extraído en el país desde hace más de 100 años, un inusual descubrimiento que ayudará a saber más sobre este periodo.
Enterrado a unos 50 centímetros bajo tierra en un túmulo que recubre una sepultura vikinga, el barco de Gjellestad, nombre de la localidad donde se halla en el sureste del país, fue detectado en 2018 gracias a un georradar.
Como los restos se encuentran en un estado muy deteriorado, según las primeras observaciones, las autoridades noruegas decidieron extraerlos rápidamente antes de que se degraden completamente.
Hasta ahora solo se habían descubierto tres navíos vikingos en buen estado en Noruega. La última excavación se remonta a 1904, con el barco Oseberg. Los tres están hoy expuestos en un museo cerca de Oslo.
"Con tan pocos barcos descubiertos, un nuevo navío vikingo supondrá un gran impacto en la comprensión de los barcos en sí, pero también proporciona valiosas informaciones para comprender el periodo histórico en su conjunto", señaló el arqueólogo Knut Paasche del Instituto noruego para la Investigación del Patrimonio Cultural (Niku), en un comunicado.
En la época de los vikingos, cuando estos guerreros y mercantes de Europa del norte recorrieron los mares entre los siglos VIII y XI, era costumbre enterrar a reyes y dignatarios a bordo de un barco izado a tierra y sepultado con objetos bajo un montículo.
"El barco de Gjellestad es un descubrimiento de una gran importancia nacional e internacional", indicó el ministro de Clima y Medioambiente, Sveinung Rotevatn, que inauguró oficialmente las operaciones de excavación.
El proceso durará cinco meses, según los arqueólogos.
(Con información de AFP)
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