El último viernes, un vehículo de la misión de la ONU pasó sobre una "bomba trampa" en la carretera de Douentza, en Mali, lo que ocasionó la muerte de dos cascos azules egipcios
El Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) condenó este sábado el ataque perpetrado contra su misión humanitaria en Mali (Minusma), en el que murieron dos cascos azules egipcios y otro resultó herido.
El ataque ocurrió ayer viernes, cuando el vehículo de la misión pasó por encima de una bomba trampa escondida en una carretera cerca de Douentza, en el centro de Mali. Los soldados formaban un convoy de protección que escoltaba a un grupo de camiones que se desplazaba de Douentza hacia Tombuctú, en el norte del país.
Los miembros del Consejo expresaron hoy su pésame a las familias de las víctimas del ataque del viernes, así como a Egipto y a las Naciones Unidas. A su vez, pidieron al Gobierno de transición de Mali que investigue "rápidamente" el ataque y lleve a los responsables ante la justicia, señalaron en un comunicado.
Los miembros del Consejo de Seguridad recordaron que la participación en la planificación, dirección, patrocinio o realización de ataques contra personal de Minusma "constituye una base para la designación de sanciones" y que la responsabilidad principal de la seguridad del personal y bienes de la ONU recae en los Estados anfitriones.
Asimismo, destacaron la importancia del compromiso y las comunicaciones entre Minusma y el Gobierno de transición de Mali y expresaron su preocupación por la situación de seguridad en el país y la dimensión trasnacional de la amenaza terrorista en la región africana del Sahel.
Acuerdo de Paz
El Consejo de Seguridad instó a las partes a implementar plenamente el Acuerdo de Paz y Reconciliación en Mali "sin más demora", lo que "junto a la intensificación de los esfuerzos para superar las amenazas asimétricas pueden contribuir a mejorar la situación de seguridad" en el país.
Los miembros del Consejo recalcaron también la importancia de que la Minusma cuente con las capacidades necesarias para cumplir su mandato y promover la seguridad del personal de mantenimiento de la paz.
La Minusma es actualmente la misión más peligrosa de las que la ONU tiene desplegadas en el mundo, aunque los ataques armados en Mali no van siempre dirigidos contra la fuerza de paz, sino, ante todo y principalmente, contra las fuerzas armadas y de seguridad maliense.
El Estado maliense, que se encuentra en un proceso transitorio tras dos golpes militares en menos de un año, no controla extensas zonas del país, concretamente del norte y del centro, donde la administración central está prácticamente ausente mientras aumentan los atentados perpetrados por diferentes grupos yihadistas.(EFE)
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