La perrita esperó a que el primer cliente abriera la puerta debido a que no podía ingresar al local por su reducido tamaño.
El can de raza teckel y tan noble nombre sorprendió a los empleados de la citada oficina al entrar en la misma nada mas abrir sus puertas y acostarse al calor en una esquina, informa hoy la edición digital del rotativo "Flensburger Tageblatt".
La perrita había esperado pacientemente ante la puerta automática del edificio a que entrara el primer cliente para acceder a la oficina, ya que su reducido tamaño no era suficiente para activar el mecanismo de apertura.
La casualidad quiso que poco después un cazador de la vecina localidad de Struckum visitara dicha oficina y reconociera al can cuando los empleados de la misma debatían que hacer con la inesperada visitante.
Al parecer, la perrita participó este sábado en una cacería de zorros en la región y perdió a su amo y al resto de cazadores y congéneres, vagando hasta este lunes pese a las bajas temperaturas que se registran estos días en Alemania.
-EFE-
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