En Baja California los puertos y aeropuertos permanecen cerrados a la espera de que pase el huracán, que se ha ido debilitando, según fuentes meteorológicas.
El paso del huracán "Jimena" por el noroeste de México no ha dejado hasta el momento víctimas mortales ni heridos en el estado de Baja California Sur, afirmó hoy el secretario (ministro) de Desarrollo Social mexicano, Ernesto Cordero.
Aunque el enviado del presidente Felipe Calderón a la zona descartó que el riesgo esté conjurado, sostuvo que las precauciones están tomadas en Ciudad Constitución, Ciudad Insurgentes y las islas Margarita y Magdalena, "que son zonas densamente pobladas".
"Toda la gente en las islas está evacuada, toda la gente está en albergues en Ciudad Constitución y Ciudad Insurgentes. Esperemos que al igual que en Los Cabos no pase nada", señaló Cordero en declaraciones a la cadena Televisa.
El ojo del huracán "Jimena", que mantiene categoría 2 en la escala Saffir-Simpson de cinco niveles y cuya zona frontal barrió de madrugada la zona más meridional del estado de Baja California Sur, tocará probablemente tierra por el norte del estado "alrededor de unas seis o siete horas", dijo el ministro.
Descartó que haya víctimas mortales o heridos tras los primeros reportes de los servicios de emergencia.
"Afortunadamente la gente ha hecho caso de los llamados de la autoridad. Se han albergado, se han refugiado y no hay pérdidas humanas que lamentar hasta el momento que tengamos conocimiento", aseguró Cordero.
El municipio de Los Cabos, en el extremo sur del estado, vivió una nota de calma relativa, constató Efe en el lugar, pero el temor está ahora a unos 300 kilómetros de esa población, en la zona de cabo San Carlos, en el centro de la península de Baja California.
El jefe de capacitación de Protección Civil de Baja California Sur, Audel Álvarez, dijo a Efe que el estado continúa "en alerta roja" (peligro máximo) y que los vientos y lluvias asociados con "Jimena" están "pegando de forma intensa" en el municipio de Comondú.
Las poblaciones más expuestas son los puertos de López Mateos y San Carlos, ubicadas en la costa occidental del estado, que, con unos 2.000 y 2.500 habitantes, respectivamente, "en este momento están en el impacto directo", agregó el funcionario.
En La Paz, la capital del estado, hubo lluvias pero "nada que represente una peligrosidad extrema" en las últimas horas, dijo Álvarez.
Hasta el momento "en todo el estado tenemos 6.000 personas evacuadas de manera precautoria", indicó el portavoz de Protección Civil, quien insistió en que los primeros datos apuntan a que "afortunadamente" no hay "ningún reporte de fatalidades".
Finalmente el secretario de Protección Civil bajacaliforniano, José Gajón de la Tova, recomendó a través de la emisora MVS que las familias permanezcan unidas en sus casas o en los 159 refugios temporales habilitados en el estado.
"Ya tenemos en cada hogar nombrado al más ecuánime de la familia para que sea el jefe de todos y haga que se cumplan todas las recomendaciones para garantizar la seguridad", aseguró.
Demandó que la gente no se tome aún excesivas libertades y haga caso en las próximas horas de las recomendaciones del Consejo Estatal de Protección Civil, que desde el domingo sigue de cerca la contingencia derivada de "Jimena".
"Está demostrado que lo que no han hecho los huracanes lo ha hecho la imprudencia o la curiosidad", añadió Gajón de la Tova.
En Baja California Sur los puertos y aeropuertos permanecen cerrados desde la tarde de ayer a la espera de que pase el huracán, que en las últimas horas se ha debilitado paulatinamente, según fuentes meteorológicas. EFE
Aunque el enviado del presidente Felipe Calderón a la zona descartó que el riesgo esté conjurado, sostuvo que las precauciones están tomadas en Ciudad Constitución, Ciudad Insurgentes y las islas Margarita y Magdalena, "que son zonas densamente pobladas".
"Toda la gente en las islas está evacuada, toda la gente está en albergues en Ciudad Constitución y Ciudad Insurgentes. Esperemos que al igual que en Los Cabos no pase nada", señaló Cordero en declaraciones a la cadena Televisa.
El ojo del huracán "Jimena", que mantiene categoría 2 en la escala Saffir-Simpson de cinco niveles y cuya zona frontal barrió de madrugada la zona más meridional del estado de Baja California Sur, tocará probablemente tierra por el norte del estado "alrededor de unas seis o siete horas", dijo el ministro.
Descartó que haya víctimas mortales o heridos tras los primeros reportes de los servicios de emergencia.
"Afortunadamente la gente ha hecho caso de los llamados de la autoridad. Se han albergado, se han refugiado y no hay pérdidas humanas que lamentar hasta el momento que tengamos conocimiento", aseguró Cordero.
El municipio de Los Cabos, en el extremo sur del estado, vivió una nota de calma relativa, constató Efe en el lugar, pero el temor está ahora a unos 300 kilómetros de esa población, en la zona de cabo San Carlos, en el centro de la península de Baja California.
El jefe de capacitación de Protección Civil de Baja California Sur, Audel Álvarez, dijo a Efe que el estado continúa "en alerta roja" (peligro máximo) y que los vientos y lluvias asociados con "Jimena" están "pegando de forma intensa" en el municipio de Comondú.
Las poblaciones más expuestas son los puertos de López Mateos y San Carlos, ubicadas en la costa occidental del estado, que, con unos 2.000 y 2.500 habitantes, respectivamente, "en este momento están en el impacto directo", agregó el funcionario.
En La Paz, la capital del estado, hubo lluvias pero "nada que represente una peligrosidad extrema" en las últimas horas, dijo Álvarez.
Hasta el momento "en todo el estado tenemos 6.000 personas evacuadas de manera precautoria", indicó el portavoz de Protección Civil, quien insistió en que los primeros datos apuntan a que "afortunadamente" no hay "ningún reporte de fatalidades".
Finalmente el secretario de Protección Civil bajacaliforniano, José Gajón de la Tova, recomendó a través de la emisora MVS que las familias permanezcan unidas en sus casas o en los 159 refugios temporales habilitados en el estado.
"Ya tenemos en cada hogar nombrado al más ecuánime de la familia para que sea el jefe de todos y haga que se cumplan todas las recomendaciones para garantizar la seguridad", aseguró.
Demandó que la gente no se tome aún excesivas libertades y haga caso en las próximas horas de las recomendaciones del Consejo Estatal de Protección Civil, que desde el domingo sigue de cerca la contingencia derivada de "Jimena".
"Está demostrado que lo que no han hecho los huracanes lo ha hecho la imprudencia o la curiosidad", añadió Gajón de la Tova.
En Baja California Sur los puertos y aeropuertos permanecen cerrados desde la tarde de ayer a la espera de que pase el huracán, que en las últimas horas se ha debilitado paulatinamente, según fuentes meteorológicas. EFE
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