Los responsables de la conservación del monumento indican que un estudio ha revelado que debido a las partículas de carbono, el mármol blanco se está volviendo amarillo.
Las autoridades de Agra, en el norte de la India, han prohibido la quema de estiércol de vaca empleado como combustible para reducir la contaminación que amarillea el mármol blanco del Taj Mahal, una de las siete maravillas del mundo.
"Un reciente estudio publicado en un periódico americano dice que debido a las partículas de carbono el mármol blanco se está volviendo amarillo", dijo a la agencia local PTI un responsable de la conservación del monumento, Pradeep Bhatnagar.
Este responsable añadió que teniendo en cuenta ese estudio se ha "prohibido el uso de tortas de excrementos de vaca -desecados- empleadas para cocinar" en esta ciudad del estado de Uttar Pradesh, cuyo área urbana tiene cerca de dos millones de habitantes.
La quema de este combustible tradicional será sancionada con una multa y las autoridades de la ciudad promoverán el empleo de gas, tanto en el uso doméstico como para vehículos.
Estas partículas contaminantes "no se lavan con las lluvias y era difícil levantar andamios alrededor del Taj Mahal para tratar los mármoles químicamente, por lo que no había otra opción que tomar esta iniciativa", aseguró Bhatnagar.
El estudio que alertó del amarilleó lo elaboraron expertos del Instituto de Tecnología de Georgia y la Universidad de Wisconsin, ambos de Estados Unidos, así como el Instituto Indio de Tecnología-Kanpur y el Servicio Arqueológico de la India.
La ciudad estudia prohibir también la quema de carbón, otra de las causas de la emisión de carbono a la atmósfera que rodea el monumento Patrimonio de la Humedad, ya que este combustible es muy utilizado en Agra para elaborar pulseras y cocinar dulces típicos.
El 59 % de la decoloración lo causa el polvo, el 38 % el conocido como carbono orgánico o marrón y el 3 % el carbono elemental o negro.
Alrededor de 700 de los cerca de 1.250 millones de habitantes de la India carecen de fuentes de energía como la electricidad o el gas y dependen de la madera, el carbón o el estiércol, según un estudio de Naciones Unidas.
El Taj Mahal, uno de los monumentos más visitados del mundo, fue objeto en 1994, 2001 y 2008 de tratamientos con un barro cuya composición se basa en un cosmético tradicional, para evitar el cambio de color y la pérdida de brillo del mármol.
El edificio lo ordenó construir el emperador mogol Shah Jahan entre 1632 y 1654 como mausoleo para su esposa favorita, Mumtaz Mahal, que murió en el parto de una de sus hijas.
EFE
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