Jaroslaw Kaczynski, hermano gemelo del fallecido presidente polaco, recibió el féretro en Varsovia procedente de Rusia, donde el sábado se produjo la catástrofe aérea.
El avión militar con los restos mortales del presidente polaco, Lech Kaczynski, fallecido ayer al estrellarse el avión en el que viajaba, aterrizó hoy en el aeropuerto de Varsovia procedente de Smolensk (Rusia).
Tras la recepción y los honores militares, el cortejo fúnebre partirá al palacio presidencial en un recorrido en el que se han apostado horas antes miles de polacos, muchos de ellos portando banderas nacionales y fotos de la pareja presidencial.
El cadáver del jefe del Estado polaco fue reconocido el sábado en el lugar de la tragedia por su hermano gemelo y líder de la oposición conservadora, Jaroslaw Kaczynski, quien también recibió el féretro en Varsovia.
El cadáver de Kaczynski no pudo finalmente se repatriado junto al de su esposa, Maria Kaczynska, asimismo muerta en la tragedia aérea, ya que según el embajador polaco en Rusia, Jerzy Bahr, su cuerpo todavía no está entre los 24 identificados.
El primer ministro polaco, Donald Tusk; el presidente del Parlamento y jefe del Estado en funciones, Bronislaw Komorowski, y el presidente del Parlamento Europeo, Jerzy Buzek, presidieron el acto en el que fue recibido el féretro del mandatario, que llegó a bordo de un avión militar polaco modelo CASA, de fabricación española.
A pie de pista, además del hermano gemelo del presidente, esperaban otros miembros de su familia, incluida la hija del fallecido gobernante, Marta.
Alrededor del palacio decenas de miles ciudadanos venidos de todaPolonia también se agolpan para recibir los restos del presidente.
Fuentes gubernamental informaron de que esperan que el cuerpo sin vida de Kaczynski sea expuesto en el palacio presidencial para que los ciudadanos puedan despedirse del dirigente, aunque para esto será necesario contar con la autorización de la familia.
La catástrofe ocurrió el sábado cuando la delegación de Kaczysnki viajaba a la ceremonia en recuerdo de los 20.000 oficiales y soldados polacos asesinados por los servicios secretos de Stalin en Katyn (Rusia) hace setenta años.
Tras la tragedia, Polonia ha decretado una semana de luto nacional en la que la mayoría de actividades culturales y deportivas serán canceladas. EFE
Tras la recepción y los honores militares, el cortejo fúnebre partirá al palacio presidencial en un recorrido en el que se han apostado horas antes miles de polacos, muchos de ellos portando banderas nacionales y fotos de la pareja presidencial.
El cadáver del jefe del Estado polaco fue reconocido el sábado en el lugar de la tragedia por su hermano gemelo y líder de la oposición conservadora, Jaroslaw Kaczynski, quien también recibió el féretro en Varsovia.
El cadáver de Kaczynski no pudo finalmente se repatriado junto al de su esposa, Maria Kaczynska, asimismo muerta en la tragedia aérea, ya que según el embajador polaco en Rusia, Jerzy Bahr, su cuerpo todavía no está entre los 24 identificados.
El primer ministro polaco, Donald Tusk; el presidente del Parlamento y jefe del Estado en funciones, Bronislaw Komorowski, y el presidente del Parlamento Europeo, Jerzy Buzek, presidieron el acto en el que fue recibido el féretro del mandatario, que llegó a bordo de un avión militar polaco modelo CASA, de fabricación española.
A pie de pista, además del hermano gemelo del presidente, esperaban otros miembros de su familia, incluida la hija del fallecido gobernante, Marta.
Alrededor del palacio decenas de miles ciudadanos venidos de todaPolonia también se agolpan para recibir los restos del presidente.
Fuentes gubernamental informaron de que esperan que el cuerpo sin vida de Kaczynski sea expuesto en el palacio presidencial para que los ciudadanos puedan despedirse del dirigente, aunque para esto será necesario contar con la autorización de la familia.
La catástrofe ocurrió el sábado cuando la delegación de Kaczysnki viajaba a la ceremonia en recuerdo de los 20.000 oficiales y soldados polacos asesinados por los servicios secretos de Stalin en Katyn (Rusia) hace setenta años.
Tras la tragedia, Polonia ha decretado una semana de luto nacional en la que la mayoría de actividades culturales y deportivas serán canceladas. EFE
Comparte esta noticia