El Gobierno saudí rechazó la decisión del Senado que pide a Donald Trump que deje de apoyar militarmente a Riad en el conflicto de Yemen tras la polémica generada por el asesinato del periodista.
Arabia Saudí calificó hoy de "injerencia" la reciente decisión del Senado de EE.UU. que pide al presidente Donald Trump que deje de apoyar militarmente a Riad en el conflicto de Yemen tras la polémica generada por el asesinato del periodista saudí Jamal Khashoggi.
El Gobierno saudí rechaza la iniciativa de los senadores estadounidenses, aprobada el pasado 13 de diciembre, por considerar que se basó en "afirmaciones y alegatos sin fundamento, y contenía injerencias flagrantes en los asuntos internos", dijo un funcionario del ministerio de Exteriores, según la agencia oficial del reino SPA.
Arabia Saudí reafirma su compromiso con Estados Unidos por sus "profundos vínculos" estratégicos, políticos, económicos y de seguridad, aunque expresa su preocupación por las posiciones expresadas por los senadores de un gobierno "aliado y amigo".
Por ello, añade, el reino "rechaza categóricamente" cualquier interferencia en sus asuntos internos y todas las acusaciones que no respeten el liderazgo de sus máximas autoridades, incluido el príncipe heredero, Mohamed bin Salman, a quien el Senado de EEUU señaló como "responsable" del asesinato de Khashoggi, periodista crítico con el régimen asesinado en el consulado saudí en Estambul en pasado 2 de octubre.
Al respecto, reitera que el asesinato de Khashoggi "es un delito deplorable que no refleja la política del Reino ni sus instituciones", y agrega que Reino reafirma su rechazo a cualquier intento de sacar el caso de justicia de Arabia Saudí.
El ministerio de Exteriores saudí recuerda su papel de estabilidad en Medio Oriente y para los esfuerzos por lograr la paz y la seguridad a nivel regional y mundial, así como de apoyo para dar estabilidad a los mercados internacionales de energía y combatir el terrorismo.
Con respecto al conflicto yemení, dice que Riad continúa sus esfuerzos para lograr una solución política por parte de los partidos locales, basada en diversas resoluciones internacionales que llevaron a los acuerdos que se anunciaron recientemente en Suecia.
La coalición árabe apoyada por EE.UU., que ha admitido ataques en los que han muerto decenas de civiles, entró en el conflicto de Yemen en marzo de 2015, momento en el que se recrudeció la guerra que ha causado la peor crisis humanitaria del mundo, según la ONU.
La resolución del Senado norteamericano da un plazo de 30 días a la Casa Blanca para retirar las tropas en Yemen, salvo las que estén dedicadas a combatir a las facciones locales de Al Qaeda. (EFE)
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