El gobierno de Gustavo Petro prevé aumentar el impuesto de la renta para las personas con ingresos mayores y reducir el monto de las exenciones para las cuentas de ahorro en Colombia.
El presidente colombiano, Gustavo Petro, ha presentado este lunes su proyecto de reforma fiscal, solo al día siguiente de su toma de posesión en Bogotá.
La iniciativa del nuevo gobierno tiene un claro afán redistributivo y pretende recaudar unos 50.000 millones de pesos (unos 11.400 millones de dólares) en los próximos cuatro años.
El centro de la reforma impulsada por Gustavo Petro serán los impuestos a la renta de las personas físicas, el pago de más impuestos para el 1 por ciento de los colombianos más ricos y la revisión de las exenciones.
También se prevé aumentar el impuesto de la renta para las personas con ingresos mayores de 10 millones de pesos anuales y reducir el monto de las exenciones para las cuentas de ahorro (AFC) a unas 700 unidades de valor tributario como máximo.
En lo referente al impuesto al patrimonio, comenzarán a tributar los capitales a partir de 3.000 millones de pesos y los de 5.000 millones pagarían el 2 por ciento. El impuesto a las ganancias ocasionales pasaría del 10 al 20 por ciento y para en el caso de las zonas francas, será necesario un mínimo de exportaciones para poder mantener el beneficio tributario que les exime de pagar el 35 por ciento de impuestos.
La reforma en Colombia incluye además los llamados impuestos saludables para las bebidas azucaradas en función de la proporción de azúcar y los alimentos ultraprocesados e impone tasas a los plásticos de un solo uso. Además elimina los incentivos tributarios a las grandes empresas que se consideren innecesarios.
Igualmente prevé acabar con el día sin IVA impulsado por el gobierno anterior porque "benefician principalmente a los sectores de altos ingresos, con capacidad de consumo y ahorro, por lo que su eliminación promueve un sistema tributario más equitativo", según el nuevo Gobierno.
Petro propone a grupos armados "beneficios penales"
El nuevo presidente de Colombia, Gustavo Petro, propuso este domingo a los grupos armados "beneficios" penales a cambio de que firmen la paz, tras el acuerdo de 2016 con la entonces guerrilla de las FARC.
"Convocamos a todos los armados a dejar las armas en las nebulosas del pasado. A aceptar beneficios jurídicos a cambio de la paz, a cambio de la no repetición definitiva de la violencia", dijo el primer mandatario de izquierda de Colombia en su discurso de investidura.
Gustavo Petro ha manifestado su interés de acordar una "paz total" con los grupos que siguieron en armas tras la disolución de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y su transformación en partido político. Por ello señaló que priorizará el diálogo con estos grupos.
La guerrilla del ELN, la última reconocida tras el desarme de las Farc en 2017, manifestó su intención de diálogo con el nuevo gobierno. Asimismo, los disidentes que no se acogieron al proceso de paz que dio fin a la otrora guerrilla más poderosa del continente se mostraron prestos a acordar un cese bilateral al fuego.
(Con información de Europa Press y AFP)
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