El papa Francisco restó importancia al incidente e incluso bromeó sobre lo sucedido.
El papa Francisco sufrió este domingo un golpe en la ceja y una inflamación en el pómulo izquierdo después de un frenazo del papamóvil que lo transportaba por un barrio de la caribeña ciudad de Cartagena, en Colombia.
El sumo pontífice de 80 años saludaba a los cientos de personas que lo recibían en el marginal barrio de San Francisco cuando, por la multitud que se agolpaba en las calles, el vehículo que lo movilizaba frenó súbitamente.
La maniobra le hizo estrellarse contra el vidrio. Uno de los agentes de seguridad lo asistió al momento y le limpió con un pañuelo blanco el sudor y la sangre, que le alcanzó a manchar el simar (capa de la túnica blanca). "Me dieron una piñada (puñetazo)", bromeó el papa latinoamericano. (Con información de EFE)
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